Ya murieron unos 480 millones de animales por los incendios producidos en Australia
Desde septiembre se quemaron más de 6 millones de hectáreas y 21 personas fallecieron por las llamas.
Australia sufre incendios forestales de una envergadura y
alcance sin precedentes: desde septiembre se quemaron más de 6 millones de
hectáreas, y perecieron al menos 480 millones de animales calcinados por las
llamas o muertos por la falta de alimentos y refugio, según un estudio de la
universidad de Sídney.
La cifra se refiere solamente a una gran parte de los mamíferos,
aves y reptiles que habitan en el estado de Nueva Gales del Sur, que con sus
36.000 kilómetros cuadrados de terrenos calcinados, es el más afectado por las
llamas.
“Es un desastre sin precedentes desde el punto de vista
de la fauna”, dijo a la agencia de noticias Efe Chris Dickman, ecólogo de
la Universidad de Sídney, quien recalcó que sus cálculos excluyen a insectos,
peces, ranas y algunos mamíferos como los murciélagos.
“Algunos de los animales han podido morir en los
incendios, otros habrían volado o se han enterrado en el subsuelo”, añadió
Dickman al subrayar que “el peligro es cuando regresan o salen a la
superficie y no encuentran comida o se encuentran con zorros o gatos que les
acechan”.
Dickman, quien fue presidente de la Sociedad Australiana de
Animales y del Comité Científico de Nueva Gales del Sur, y su equipo de la
Universidad de Sídney, hicieron la estimación apoyándose en un estudio del
Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, siglas en inglés) de 2007 sobre el
impacto de la tala de árboles en los animales.
Ese trabajo de WWF combinó los datos de la superficie de
deforestación con los de otros estudios sobre la densidad de población de
mamíferos en Nueva Gales del Sur, una fórmula que el equipo de Dickman utilizó
para alcanzar su estimación.
El experto señaló que extrapolando los resultados al
conjunto del país, la cantidad de animales afectados podría alcanzar los mil
millones.
Ecosistemas difíciles de reconstruir
El impacto de los incendios no se sabrá a ciencia cierta
hasta que los científicos puedan entrar en las zonas calcinadas, pero ya se
calcula que el daño es inmenso por el desequilibrio causado en los ecosistemas,
donde muchas de las especies afectadas contribuyen a la polinización de plantas
o al transporte de semillas, entre otros.
Dickman señaló que la recuperación de las zonas quemadas
puede verse afectada por la ausencia de estas especies que desempeñan un papel
clave en la salud de los distintos hábitats.
“Si los ecosistemas afectados están aislados puede que
pasen muchos años antes de que algunas especies regresen. Hay muchos reptiles y
mamíferos que no tienen mucha movilidad. Y puede que algunos no regresen
nunca”, dijo el ecólogo.
Según el experto, otros ecosistemas que no fueron tomados en
cuenta también se verán afectados, como los ríos, que verán una degradación de
la calidad de sus aguas, lo que tendrá consecuencias en las fuentes de comida
de los animales que viven en ellos.
Australia alberga a una gran variedad de animales únicos en
su territorio continental, con unas 300 especies nativas incluidos marsupiales
como los canguros y los koalas, monotremas como los ornitorrincos y los
equidnas, y los placentarios como los dingos.
De estas, unas 244 especies o el 81 por ciento por ciento se
encuentran solo en Australia, recalcó la Universidad de Sídney en un
comunicado.
“Lo que es espantoso es que unas 34 especies de
mamíferos nativos de Australia se han extinguido en los últimos 200 años con la
colonización. Es la tasa de pérdida más alta de cualquier región del
mundo”, enfatizó Dickman al expresar que se resiste a pensar que la
catástrofe desatada por los incendios sea la nueva norma.
“Con la aceleración del cambio climático, tendremos
períodos de sequía más largos y los incendios serán más severos en el futuro”,
reflexionó el ecólogo al abogar por un trabajo conjunto entre científicos y los
gobiernos.
Fuente: TN