Tupungato conmemoró el Bicentenario del primer izamiento de la Bandera Argentina en las Islas Malvinas

Se cumplieron 200 años.

El pasado viernes 6 de noviembre, se conmemoró en la Plaza “Héroes de Malvinas” un hito soberano: se cumplieron 200 años del primer izamiento de la Bandera Argentina en las Islas Malvinas, por ello con un emotivo acto el Intendente Gustavo Soto, junto al fefe del Regimiento de Infantería de Montaña 11, Teniente Coronel Marcos Miguel Copertino, acompañaron a los Veteranos de Guerra del departamento representados por el suboficial Mayor (retirado) Caballero, Indolfo Napoleón; suboficial Mayor (retirado) Villegas, Jorge Raúl y sargento ayudante (retirado) Agüero, Mario Ernesto en el acto de izamiento de nuestra máxima insignia patria.

Por su parte el intendente Gustavo Soto, expresó que es necesario conmemorar estas fechas para continuar poniendo en valor el accionar de quienes han luchado por la Patria, aquellos combatientes que han abrazado nuestra bandera incluso hasta la muerte, y aseveró en sus palabras que “ese es el ejemplo que tenemos que seguir y en momentos como los que les toca atravesar hoy día a nuestro país para que ese ejemplo tenga el correlato que tiene que tener: una Argentina próspera, una Argentina que trabaje, una Argentina mejor y eso lo tenemos que hacer juntos y cada uno estando en el lugar que tiene que estar, dar lo mejor que tiene en pos de ese objetivo”.

Un poco de historia

La historia cuenta que en el momento de la Revolución de Mayo, las Islas Malvinas -que habían sido objeto de disputas entre España, Francia y Gran Bretaña en el siglo XVIII- se encontraban bajo el pleno ejercicio de soberanía por parte de las autoridades españolas, con una posesión exclusiva, efectiva, ininterrumpida y no contestada por Gran Bretaña ni por otra potencia extranjera. Estos derechos de soberanía pasaron a la Argentina, en tanto Estado sucesor de España.

La presencia española en las islas cesa el 13 de febrero de 1811, cuando el último Gobernador de la época Virreinal de las Malvinas se retira de las Islas, en el marco del conflicto con la Primera Junta de Buenos Aires.

A pesar de su evacuación, las Islas Malvinas no permanecieron vacías u olvidadas. Con el archipiélago se desarrollaba una fluida circulación de bienes, capitales y personas gracias a los recursos naturales que poseía: lobos y elefantes marinos, ballenas y ganado cimarrón. Buques de origen británico, estadounidense, francés y argentino los explotaban y utilizaban las costas continentales y las Islas como estaciones de recalado, cacería y faenado. Esto llamó la atención de las autoridades de Buenos Aires quienes, desde 1813, otorgaban permisos de pesca, dictaban disposiciones para evitar la depredación de los recursos y controlaban la instalación de cualquier establecimiento de carácter permanente en la región.

Es en este marco que el izamiento de la Bandera Nacional y la presencia en Malvinas en 1820 de David Jewett, marino estadounidense al servicio de la Armada Argentina, cobra toda su dimensión.

Con el inicio de los procesos independentista en latinoamérica desde 1810, los nuevos gobiernos patriotas debieron enfrentar al poder realista que se les oponía por mar y por tierra. David Jewett, al igual que otros marinos estadounidenses y europeos, se incorporaría a esa lucha al servicio de las Provincias Unidas, desarrollando actividades de corsario hasta 1817.

En enero de 1820, el Director Supremo de las Provincias Unidas, Jose Rondeau, nombró, con todas las atribuciones y prerrogativas del cargo, a David Jewett como “Coronel del Ejército al servicio de la Marina.” Y así zarpó el 20 de enero, al mando de la fragata “La Heroína”, contando con el reconocimiento de las autoridades argentinas como buque de guerra de Estado, para internarse por el Atlántico Sur.

Jewett navegó en La Heroína a lo largo de 10 difíciles meses y a finales de octubre de 1820 alcanzó Puerto Soledad en las Islas Malvinas donde encontró varias embarcaciones de distintas banderas que recalaban temporalmente allí como parte de sus viajes de caza y pesca a la región austral.

El día 2 de noviembre Jewett invitó a los otros capitanes a encontrarse con él mediante una circular en la que les informaba que había sido comisionado por el Gobierno de las Provincias Unidas para tomar posesión del archipiélago. Señalaba también que, en consonancia con las normas dadas por las autoridades de Buenos Aires, procuraría evitar la destrucción de los recursos de las islas.

El día 6 de noviembre de 1820 se realizó la ceremonia de toma de posesión de las Islas Malvinas. Conforme el relato de testigos presenciales, como el Capitán británico James Weddell —quien relata el episodio en su célebre “Un viaje hacia el Polo Sur (1822-1824)”— y el francés Louis de Freycinet, el coronel Jewett, frente a las tripulaciones ancladas en Puerto Soledad, y en nombre del Gobierno de Buenos Aires, izó la Bandera Argentina, leyó una proclama y disparó una salva de 21 cañonazos.

Este hecho histórico constituyó un acontecimiento de importancia fundamental en la consolidación de la ocupación efectiva de las Islas, como manifestación del ejercicio de los derechos de soberanía por parte de nuestro país sobre las Malvinas.