Los animales tienen características especiales y son utilizados en distintas zonas del país para diversas tareas. Además de la función específica para el Ejército Argentino, también se provee al sector privado.
La Dirección de Remonta y Veterinaria del Ejército Argentino desarrolló una raza asnal propia con el objetivo de producir luego las mulas que se emplean en diferentes regiones de difícil acceso, especialmente en la Cordillera de los Andes. Estos animales permiten el traslado de personas y provisiones.
Por otra parte, los burros tienen otros destinos como el control de predadores en muchos campos ganaderos de todo el país.
Con ese objetivo hace más de un siglo nació esta Dependencia del Ejército Argentino, que sigue cumpliendo esa misión y que con el paso de los años, desarrolló la única raza de burros que tiene registros genealógicos en los libros de la Sociedad Rural Argentina.

Además, provee al sector privado de reproductores asnales mediante el fomento de la cría de estos équidos, que en muchos casos son empleados para el control de predadores como el puma y otras especies que proliferan en regiones como el NEA y la Patagonia. Estos depredadores afectan a rodeos comerciales de ovinos, bovinos y equinos.
La Dirección tiene más de 101 años trabajando en la actividad y dando cumplimiento a la Ley de Fomento Equino. “Lo que hacemos específicamente con los burros es producir el Asno Remonta Argentino, la única raza asnal registrada en el país y que fue creada por el Ejército Argentino”, explicó el Veterinario Santiago Bruno.
Con rango de Coronel, el profesional indicó: “El Ejército siempre necesitó desde sus comienzos contar con una mula que tuviera un biotipo especial. No es cualquier mula la que se emplea, son animales adaptados para el desplazamiento en las zonas de monte y montaña. Pero a su vez sobre sus lomos se pueden trasladar personas, pertrechos y hasta material bélico, es decir muchos kilogramos y en la alta montaña”.
La mula es el resultado de la cruza entre una yegua y un burro, lo que se logra por inseminación artificial del asno Remonta con una yegua que puede ser de Silla o de raza Pura Sangre Percherón.
“De esa manera cubrimos los dos biotipos de mulas que necesita el Ejército, es decir de carga y de silla. Estas últimas llevan personal montado y las de carga transportan materiales y todo lo necesario para subsistir en ambientes particulares como el monte y la montaña”.
Las mulas se producen en Mendoza, en el Establecimiento Campo de Los Andes, cerca de la cordillera, para que desde su nacimiento se hallen adaptadas a la región y sus climas.

Bruno explicó que en las últimas décadas se dio una reducción sustancial del rodeo asnal en todo el mundo, situación que se está revirtiendo porque se comenzó a revalorizar su uso no solo en la producción de mulas, sino también para rodeos ganaderos.
El especialista añadió que esta especie, y en particular la raza Remonta, es un animal muy rústico que puede sobrevivir a la falta de alimento y de agua, y que se adaptan a condiciones ambientales muy diversas y extremas. También supera enfermedades sin problemas y es prácticamente resistente a la anemia infecciosa equina, entre otras patologías. Son animales de buen carácter, fáciles de manejar y muy longevos, ya que pueden vivir 40 o más años. Por todo esto es un animal muy interesante.
El veterinario del Ejército contó que ellos producen burros y que como acción de fomento de su cría suelen entregar algunos reproductores a los civiles. Estos a su vez los multiplican y los emplean en rodeos ganaderos de ovinos y bovinos, donde prestan distintos servicios.

Por ejemplo, en las cabañas de toros los asnos evitan que estos animales se peleen y lastimen mutuamente, con lo cual se produciría una importante pérdida teniendo en cuenta su elevado valor económico y genético.
Los asnos también defienden a los equinos, ovinos y bovinos del ataque de los predadores como el puma o perros salvajes. De esa manera los burros constituyen un control biológico eficiente cuando ocurren desbalances ecológicos que llevan a la proliferación de predadores.
Finalmente explicó que entre las bondades de la cría de los asnos, se destaca la capacidad de ser empleada la leche de las burras. Si bien en nuestro país su desarrollo es incipiente, la leche de asnos es muy requerida en Europa. En la Argentina, dice Bruno, de a poco se va instalando ya que es apta para reemplazar la leche de vacas en aquellas personas que padecen intolerancia a la misma.
Fuente: Bichos de Campo