Entrega del barrio Virgen del Valle en Tupungato: la historia detrás del sueño de la casa propia

Hacía casi 10 años que decenas de familias esperaban la concreción de sus viviendas.

Cuando los sueños nacen del corazón y el anhelo, ninguna adversidad puede apagar la esperanza de concretarlos. Tal es así que las familias que conformaban la Unión Vecinal “Barrio Virgen del Valle I” lograron alcanzar la meta de la vivienda propia, que inició casi hace 10 años atrás -según recuerda Juana Leyes, una propietaria que fue docente del intendente Soto y que ayer se encontró nuevamente con su ex alumno quien le entregó las llaves de su nueva casa-.

La entrega se realizó el pasado jueves y correspondió a 25 construcciones emplazadas en la manzana T del conocido loteo T.I.S.A, ubicado en Cordón del Plata. Los 21 beneficiarios de las 25 viviendas, recibieron las llaves de sus casas de manos del intendente Gustavo Soto y el gobernador de la provincia, Rodolfo Suárez, acompañados de funcionarios provinciales y municipales. Además, del ministro de Planificación e Infraestructura Pública,  Mario Isgro; la presidenta del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), María Marta Ontanilla; el presidente del Honorable Concejo Deliberante, Antonio Balderrama y el director de Vivienda, Javier Pulido.

Esta concreción fue posible gracias a varios factores, en primera instancia, a la organización y perseverancia de los beneficiarios, al IPV que retomó la obra junto al Gobierno provincial y Municipal y al intendente Soto, “porque aquella vez (año 2017) que llamaron del IPV y dijeron tenemos 25 viviendas no dudo un minuto en dárselo a esta Unión Vecinal, agradezco al presidente de la Unión Vecinal porque hizo lo imposible y lo imposible para traer todos los papeles necesarios” expresó el director de Viviendas.

Por otro lado, continúo: “Agradezco a la gente del IPV, a los empleados porque ahora vemos el proyecto terminado; no vemos cemento, ladrillo, cal; mucho del trabajo no se ve, no sale a la luz y es gracias a ese trabajo que se concluyen las cosas; y por último agradezco a los adjudicatarios que tuvieron paciencia tantos años, por esperar, por el respeto; hoy les estamos dando una casa, que sea un hogar, dependerá de ellos”.

Es importante destacar que la obra de estas viviendas no se detuvo, ni se vio afectada por la pandemia del COVID-19 y que debido a esta situación la entrega sí fue diferente, pero de igual manera emotiva; siendo distinta a las entregas anteriores -donde las familias son parte de este inolvidable momento- esta vez sólo pudo estar presente un integrante de la familia cumpliendo esa persona y todos los presentes con las medidas de distanciamiento y el protocolo sanitario correspondiente.

La historia detrás de un sueño

Esta obra se encontraba enmarcada dentro del Programa Federal “Techo Digno” y fue licitada en el año 2017, los fondos fueron aportados por el gobierno provincial y municipal haciéndose responsables.

Las viviendas fueron realizadas por la empresa constructora “Convicciones”, en estructura de hormigón, ladrillón y cubierta liviana de madera y chapa, en una superficie total de 70,95 m2; con una inversión aproximada –en el 2017- de un millón de pesos por cada vivienda, presupuesto inicial que si fuera actualizado a la fecha rondaría en una inversión de 70 millones de pesos por las 25 viviendas.

Además están conformadas por dos dormitorios, cocina-comedor; revestimiento cerámico en baño, artefactos y accesorios; mesada de granito, lavadero y grifería. El emprendimiento también cuenta con la red eléctrica y de agua; enripiado de calles, cunetas, cordones, banquinas, puentes peatonales, rampas en las esquinas, alumbrado público y los correspondientes desagües pluviales.

En cada entrega lograda, es inevitable no quedarse con una inmensa sensación de felicidad y admiración por aquellos que lucharon para cumplir su objetivo. Quedan grabadas esas miradas colmadas de ilusión y planes para construir lo que será un hogar donde transcurrirán años de historia y anécdotas imborrables; esta acción es sin dudas una de las más gratificantes que puede llevar a cabo el Municipio.

 “Entregamos raíces, enterramos material para que dé sus frutos y el fruto es una familia que tiene hoy y empieza a gozar su propia casa” fueron las palabras con las que cerró el intendente Gustavo Soto, en un día de alegría y orgullo por lo concretado como mandatario.