Maxi trabaja en el nosocomio regional y cuenta cómo es la vida de un camillero, siendo el primer contacto con un paciente en plena pandemia.
A 8 meses de iniciado el 2020, la pandemia no da tregua en Argentina donde los casos de coronavirus van en ascenso y hasta el momento se desconoce si hemos llegado o no al pico. En consonancia, Mendoza está en el ranking de las provincias más afectadas con más de 2.500 contagios y zonas, como el Valle de Uco, empiezan a registrar números que hasta hace tan solo semanas, resultaban impensandos.
En esta guerra alrededor del mundo, los profesionales de la salud son los que se encuentran en la primera línea de fuego y en ese frente, son los camilleros los que representan el primer contacto con un paciente con Covid-19 en su traslado hacia algún nosocomio.
Es por eso que El Cuco Digital tomó contacto con Maxi Agüero, quien se desempeña como camillero en Hospital Regional Antonio J. Scaravelli del departamento de Tunuyán y contó cómo es el trabajo que realiza este grupo de profesionales en medio de una pandemia.
“Todos los días acudimos al llamado del hospital por completo. Entramos 7:00 a.m. y a las 7:30 horas estamos ingresando pacientes al quirófano o tal vez entrando con algún sospechoso de Covid y algunos positivos. El camillero llega a una urgencia, es el primeo en bajar al paciente de la ambulancia o autos particulares”, comentó.
“Muchos de los que somos camilleros tenemos nuestras esposas como enfermeras y compartimos ambas cosas, a veces te pasan cosas que no esperabas”.
Sobre cuál es el procedimiento y los cuidados que mantienen para volver a su hogar o retornar a la comunidad después de una guardia de trabajo, Maxi contó: .“Nosotros nos desinfectamos y nos bañamos luego de un día de trabajo, y a los familiares los vemos por videollamada. Hoy somos 9 en el hospital y a veces tenemos que cubrir guardias y algo que nos caracteriza es que nunca nos gusta pasarnos por partes de enfermo”.
Maxi también destacó la solidaridad entre compañeros y compromiso con la comunidad y los esfuerzos que conlleva tener una profesión de este tipo.
“Por ahí la gente piensa que los camilleros solo hacemos el traslado, pero no es así, nosotros debemos capacitarnos, y con el correr de los años nos autocapacitamos y pagamos diferentes cursos, más de la mitad tenemos título, y la verdad en la actualidad la pandemia nos ha complicado por los horarios y la rutina”.
Desde el ojo clínico de un camillero ve muchas intervenciones sanitarias: “Me ha tocado a mí y mis compañeros estar en muchas urgencias y junto a los médicos hemos ayudado a mantener las personas, y cosas que nos sorprende, eso nos va formando. A algunos de mis compañeros les toca asistir un accidente de tránsito y buscamos ayudar a la sociedad en momentos de crisis”.
Para finalizar, Maxi Agüero agregó un pedido para la comunidad: “Queremos decirle a la sociedad que hay que tener paciencia y comprender el trabajo que realiza el personal del hospital, y uno ve que hace juntadas o no respetan las medidas sanitarias, también somos seres humanos y queremos que todo vuelva también pero es imposible ya, y queremos pedir que se pongan una mano en el corazón y nos ayuden desde quedarse en casa y cuidarse”.
El Cuco Digital agradece la labor de todos los camilleros y otros profesionales de la salud que desempeñan funciones en los hospitales provinciales y del Valle de Uco por su compromiso y amor que realizan su trabajo día a día, estando al frente de la batalla contra el coronavirus.
Maxi dedica esta nota “Oscar Pocho Ortiz”, un ex compañero que hoy ya no está entre ellos tras luchar contra una grave enfermedad terminal.