Este año la conmemoración lleva como lema “Con voluntariado, unidos somos más fuertes”.
El 17 de diciembre de 1985, la Asamblea General de Naciones Unidas invitó a lo gobiernos a celebrar cada 5 de diciembre el Día Internacional de los Voluntarios, y los exhortó a adoptar medidas para que se cobrara mayor conciencia de la importante contribución de los voluntarios, estimulando así a más personas en todas las condiciones sociales a ofrecer sus servicios, tanto dentro de su propio país como en el extranjero.
El programa de Voluntarios de la ONU celebra el 5 de diciembre no solo para resaltar la labor del voluntariado en todas sus facetas, sino también para rendir un homenaje especial a todos los voluntarios que trabajan para conseguir los nuevos objetivos mundiales.
La importancia del voluntariado y el desarrollo
Todos estos años, el Día Internacional de los Voluntarios se ha usado de forma estratégica: muchos países lo han aprovechado para destacar las contribuciones de los voluntarios para combatir la pobreza, el hambre, la enfermedad, el analfabetismo, la degradación medioambiental y la discriminación hacia las mujeres.
La organización del Día Internacional de los Voluntarios suele ser resultado de la colaboración entre el sistema de las Naciones Unidas, gobiernos, organizaciones de voluntarios y personas comprometidas. También es frecuente que participen representantes de los medios de comunicación o del ámbito académico, fundaciones, el sector privado, grupos religiosos, así como organizaciones deportivas y recreativas.
Resoluciones relevantes
Sin duda la resolución más relevante en esta materia se centra en la proclamación oficial del día internacional en 1985, para dar paso, ya en 1997, a la proclamación del Año Internacional del Voluntariado, que se celebraría en 2001.
La Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución de 2002, hizo un llamamiento al programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) para garantizar el impacto y el potencial del Día Internacional del Voluntario a través de un seguimiento del mismo.
Siete años más tarde, en 2009, la Asamblea General establece necesarias dos sesiones plenarias en 2011 dentro del sexagésimo sexto período de sesiones de la Asamblea General para realizar un seguimiento del Año Internacional y la conmemoración de su décimo aniversario.
Otras efemérides
● 1976. En San Sebastián, en el estadio de Atocha, se juega el clásico entre los dos equipos vascos de primera división: el local, la Real Sociedad, y el Athletic de Bilbao. En un hecho sin precedentes, los jugadores salen a la cancha con la ikurriña, la bandera nacionalista diseñada por Sabino Arana a comienzos de siglo, que fue prohibida durante la dictadura franquista, y que que aun seguía siendo ilegal. La enseña fue adoptada como bandera oficial pocos años más tarde, cuando el País Vasco, con España ya en democracia, alcanzó su autonomía.
● 2012. Diez días antes de cumplir 105 años, fallece en Río de Janeiro el arquitecto Oscar Niemeyer. Alcanzó celebridad mundial por diseñar Brasilia, la capital brasileña desde 1960. Adhirió al Partido Comunista y recibió el Premio Pritzker (considerado el “Nobel de Artquitectura”) en 1987; y el Premio Príncipe de Asturias de las Artes en 1988.
● 2012. En la víspera de su 92º cumpleaños muere Dave Brubeck. El pianista y compositor fue uno de los músicos de jazz más admirados y respetados, sobre todo con su cuarteto, con el que en 1959 grabó Time Out, el primer disco de jazz que superó el millón de ejemplares vendidos.
● 2013. Nelson Mandela muere a los 95 años en Johannesburgo. El líder sudafricano pasó 27 años preso de los supremacistas del apartheid, entre 1963 y 1990. Fue liberado y comenzó la carrera a la presidencia, que logró en las históricas elecciones de 1994, las primeras en las que pudo votar la mayoría negra. Se mantuvo en el gobierno hasta 1999. En 1993 recibió el Premio Nobel de la Paz con Frederik De Klerk, el último presidente blanco y artífice de la transición hacia una Sudáfrica democrática. Su última aparición pública fue en 2010, cuando se inauguró la Copa del Mundo de fútbol. Quince años antes, como presidente, Mandela había utilizado otro mundial, el de rugby, que ganó Sudáfrica, para impulsar la convivencia entre blancos y negros.