Tiene vitaminas, poca azúcar y previene problemas cardiovasculares e intestinales. En Mendoza lo podemos conseguir fresco y recién cosechado. Desde 365 Tentaciones te contamos sus múltiples propiedades y su versatilidad para deliciosas recetas.
El verano es la estación de los duraznos, que en Mendoza se consiguen frescos y deliciosos: la provincia tiene 16 mi hectáreas de este manjar, que puede consumirse solo y es versátil para postres de todo tipo.
Argentina es hoy una de las principales productoras del mundo de esta fruta llegada de oriente: se cultiva en San Rafael, General Alvear, Valle de Uco y toda la zona Este.
El árbol es mediano y mucha gente tiene uno en sus hogares. Florece en primavera y da la fruta cuando llega el calor. Además, es longevo: garantiza por lo menos dos décadas de cosecha.
Y como toda fruta y verdura, tiene múltiples beneficios para la salud.
Ayuda a sanar los calambres o fatiga muscular, ideal para aquellas personas que hacen ejercicio.
Mantiene la salud intestinal y combate el estreñimiento.
Es una buena buena alternativa para las personas que están a dieta porque aporta una reducida cantidad de azúcar. Incluso, es apto para personas con diabetes (siempre y cuando cuenten con la aprobación de su médico).
Tiene vitamina A, B1, B2 y vitamina C. La vitamina A es un nutriente importante para la visión, el crecimiento, la división celular, la reproducción y la inmunidad.
La tiamina (vitamina B1) es necesaria para el crecimiento, el desarrollo y el funcionamiento de las células, y que ayuda al cuerpo a generar energía a partir de nutrientes.
La vitamina B2 es importante para el crecimiento del cuerpo. Además ayuda en la producción de glóbulos rojos y a la liberación de energía de las proteínas.
La vitamina C, además de mejorar el sistema inmune, es un antioxidante natural para la piel, los huesos y el tejido conectivo.
Disminuye el colesterol malo del cuerpo, por lo que previene problemas cardiovasculares y degenerativos.
Mantiene saludables las membranas mucosas, así como la elasticidad en la piel, gracias a su contenido en ácidos grasos poliinsaturados.
Cómo elegirlos
Es preferible que no tengan magulladuras y sean suaves al tacto. Si están demasiado blandos, es que pasaron el punto de maduración, pero sirven para una exquisita mermelada. Por la delicadeza del fruto pulposo y de piel fina, la recolección tiene que hacerse a mano.
Deliciosas recetas
El durazno se puede comer solo, es delicioso en licuados combinado con naranja, kiwi y banana. Pero también es muy versátil para preparar postres.
Durazno y quinoa
Ingredientes
2 yoghur natural pequeños
2 yoghur de coco
3 duraznos, en trozos
2 tazas de agua
1 cucharadita de sal
3/4 tazas de quínoa, enjuagada
2 duraznos, en rebanadas, para decorar
4 cucharadas de almendras, fileteadas para decorar
Preparación
Licuar los yogures con los duraznos. Reservar.
Calentar en una olla el agua y agrega la sal y la quínoa. Cocinar la quínoa 20 minutos a fuego bajo, tapada o hasta que esté cocida. Enfriar.
Servir la mezcla de yoghur en vasos y decorar con quínoa, rebanadas de durazno y almendras.
Rellenos con canela y nueces
Ingredientes
5 duraznos
1 yema de huevo
3 sobrecitos o 3 cucharaditas de edulcorante en polvo
1 taza de avena arrollada
Canela, manteca y nueces c/n
Preparación
Pelar los duraznos, partirlos en mitades y quitarles los carozos. Pisar uno de los duraznos junto con la yema, el endulzante y la avena (sin emplearla todo) hasta formar una pasta.
Colocar los medios duraznos en una fuente de hormo ligeramente enmantecada. Rellenar las cavidades con la pasta y espolvorear con las nueces . Colocar una cucharadita de manteca sobre los duraznos y cocinar a horno medio durante 25 minutos, evitando que se doren.
Mermelada light
Ingredientes
2 duraznos
1 sobre de edulcorante
Jugo de limón medio limón
Preparación
Pelar los duraznos y sacarles el carozo. Cortar en cubitos.
Llevar a una sartén sin nada a fuego medio y cocinar hasta que empiecen a estar tiernos.
Agregar el edulcorante y seguir revolviendo junto con el jugo de limón. Cuando llegue a la consistencia deseada, pasar a un recipiente y enfriar.
TIP: es una receta de mermelada sin nada de azúcar, así que dura unos 2 a 3 días en la heladera.
Durazno con yogur, lima y menta
500 gramos de yogur griego
c/n de azúcar o endulzante al gusto
3 duraznos grandes
1 lima
2 ramitas de menta
una pizca de nuez moscada
1 vaina de semillas de cardamomo
Esencia de vainilla
Coco rallado
Preparación
Endulzar el yogur con azúcar, miel o el endulzante o edulcorante deseado, mezcla bien para que quede fino y cremoso. Reserva en frío.
Pelar y cortar duraznos en dados irregulares, ponerlos en un recipiente con el jugo de la lima o limón. Incorporar la menta lavada. Agregar el resto de los ingredientes.
A la hora de servir se retira el yogur de la heladera, se pone en un vaso y se cubre con el durazno bañado el lima, especias y menta.
Mousse de durazno
Ingredientes
1 paquete de gelatina de durazno
Cuatro o cinco duraznos
1 taza de crema de leche
Media taza de azúcar
Preparación
Colocar el contenido de la gelatina en la licuadora, agregar los duraznos y licuar. Colocar la preparación en una olla. Llevar a fuego y revolver permanentemente hasta calentar,cuidando que no hierva. Retirar y dejar enfriar.
Batir la crema hasta espesar y agregarla a la preparación anterior, mezclando hasta integrar. Distribuir en copas y llevar a la heladera durante 4 horas como mínimo. Decorar con duraznos en cubos.
Cóctel de durazno y sidra
Ingredientes
Cuatro o cinco duraznos
Un paquete de leche condensada
Hielo
Sidra
Preparación
Cortar en trozos los duraznos y licuarlos con la leche condensada. Agregar la sidra y revolver hasta integrar. Sumar el hielo.