Se buscaría compensar el cierre del programa proponiendo un nuevo seguro agrícola y créditos a tasa cero para mitigar los efectos de las tormentas.
El Gobierno de Mendoza tomó la decisión de terminar con el programa de la lucha antigranizo, debido a los altos costos y el escaso impacto del método para combatir las tormentas. En su reemplazo, Alfredo Cornejo propondrá un nuevo seguro de riesgo agrícola y créditos a tasa cero, como un nuevo paradigma para mitigar los efectos de las tormentas.
La decisión del Ejecutivo apuntará a desaparecer el programa, con aviones y personal, entre pilotos y técnicos, y el equipo técnico que incluye, entre otros aspectos, los radares.
La decisión está en consonancia con el cierre del Instituto de Desarrollo Rural y el Instituto de Desarrollo Comercial, todos bajo el paraguas del ministerio de Producción a cargo de Rodolfo Vargas Arizu.
Actualmente, el programa se ejecuta a través de Aemsa, una de las sociedades anónimas creadas por el Estado provincial en un 90% y un 10% por los municipios, pero principalmente, General Alvear. Aemsa cuenta con cerca de 80 empleados. Esta empresa dejaría de funcionar porque se termina el contrato.
El programa de la lucha antigranizo cuenta actualmente 4 aviones, cuenta con 27 pilotos, 12 mecánicos y 38 operadores de radares.
El costo anual es de 10 mil millones de pesos, aproximadamente. A la vez cuenta con estaciones y radares en los cuatro oasis de la provincia.
En su reemplazo, desde la Casa de Gobierno adelantaron el diseño de un nuevo seguro de riesgo agrícola para el sector agrario de la provincia.
A esto, lo complementarán con créditos blandos para que productores puedan adquirir la malla antigranizo. Para esto, el Gobierno cerró acuerdos con diferentes entidades bancarias.
Se trata de una decisión histórica, puesto que el programa comenzó a aplicarse de manera incipiente desde 1958, hasta que se consolidó en las últimas décadas con financiamiento propio. Sólo 2023, se invirtió en 1.190 millones de pesos para reforzar el presupuesto del área. Y posteriormente, se destinaron otros 456 millones de pesos para la compra de bengalas.
Sin embargo, la eficacia del programa siempre generó controversia. Sobre todo, por el presupuesto destinado cada temporada y la ferocidad de las tormentas, que provocaron en los últimos años grandes pérdidas en la producción local.
Fuente: El Sol Diario