Así lo afirmó Mauro Acuña director del hospital del departamento de Tunuyán.
La crisis económica que azota a los argentinos tiene cada vez más un correlato en la salud. No solo se registran suspensiones de tratamientos y bajas en los planes de las prepagas, sino que se observa un incremento en la atención en los efectores públicos. Ante esta situación, El Cuco Digital consultó con Mauro Acuña, actual director del Hospital Scaravelli del departamento de Tunuyán.
Acuña explicó la situación que enfrenta el hospital en estos tiempos de crisis. “La situación de la guardia es siempre complicada por la cantidad de pacientes que recibe. Estamos atendiendo alrededor de 200 o 250 personas por día. La consulta es muy variable y dinámica porque hay épocas, por ejemplo, en el invierno la consulta pediátrica aumenta por patologías respiratorias, ahora en verano la gastroenteritis se ve mucho”, afirmó.
Además, Acuña hizo hincapié en la importancia de que la población tenga paciencia a la hora de asistir a una guardia. “La guardia es de emergencia, lógicamente por ahí la situación que tenemos es que hay muchos pacientes que han dejado de pagar su obra social y vuelcan la consulta al hospital cuando no consiguen en los consultorios externos”.
“Es importante que la población entienda que en las guardias el paciente es clasificado en códigos de diferentes colores, siendo el rojo y el amarillo los graves y azul o verde no es una urgencia y el paciente puede esperar”, finalizó.