Tras conocerse el decreto que autoriza y reglamenta la técnica en la provincia, Daniel Funes, ambientalista de San Carlos, expresaba que se deberá luchar contra el fracking como sucedió con la minería.
Luego de la reglamentación por parte del Gobierno de Mendoza de las actividades de exploración y explotación de hidrocarburos no convencionales en la provincia, la empresa petrolera El Trébol presentó el pasado viernes el primer pedido de explotación no convencional mediante el proceso de estimulación hidráulica o fracking.
Esta noticia fue comunicada por el subsecretario de Energía de la provincia, Emilio Guiñazú, durante el anuncio del Ejecutivo provincial del decreto que reglamenta la estimulación hidráulica para la extracción de hidrocarburos.
«Ya estamos tratando el primer pedido de explotación no convencional en la Provincia de Mendoza, a partir de la publicación de este decreto», manifestó el funcionario en conferencia de prensa y aclaró que se trata de El Trébol, la empresa que había estado a cargo de la prueba piloto a mediados del 2017 en cuatro pozos en Puesto Rojas, Malargüe.
Resaltó que la normativa ha dejado totalmente en claro qué es lo que tiene que hacer la empresa y qué es lo que tiene que controlar el Estado y afirmó que «estamos con la tranquilidad de poder avanzar con esa primera concesión no convencional».
Guiñazú expresó que el potencial de la provincia en cuanto a explotación y exploración no convencional es «muy alto» ya que el 30% de la formación Vaca Muerta está en territorio mendocino. Además, en la cuenca cuyana hay otras dos formaciones no convencionales que son Cacheuta y Potrerillos. «Estamos analizando la posibilidad de hacer estudios para saber qué calidad de recurso hay ahí», indicó.
Por otra parte aseguró que el desarrollo no convencional que están analizando concesionar «puede llegar a traer inversiones en el orden de los 1.000 millones de dólares y prácticamente duplicar el nivel de actividad en la provincia de Mendoza».
En este sentido consideró que «si el resto de las empresas se animan a hacer esta actividad en Mendoza le estamos abriendo un nuevo horizonte productivo a la provincia muy importante».
Fuente: Sitio Andino
Los ambientalistas
El pasado lunes, Daniel Funes, reconocido ambientalista de San Carlos, expresaba a El Cuco Digital que «nos oponemos al fracking porque no se sabe las consecuencias de las fracturas en las profundidades. Consideramos que Cornejo pone en riesgo el agua de la provincia de Mendoza”.
“No tan sólo los ambientalistas nos oponemos, sino que los petroleros están enojados porque la reglamentación también supone que hoy puede venir Shell de otro lugar del mundo y traer sus empleados, tecnologías, insumo y hacer fracking en Mendoza, hacer negocios e irse, dejando sin trabajo a los petroleros mendocinos”:
Por último, Funes concluyó haciendo referencia a que “el fracking pone en riesgo el agua y el gobierno es bastante hipócrita; sale a defender el agua con La Pampa diciendo que no se le puede pedir agua al desierto y ahora nosotros como desierto ponemos en riesgo el agua subterránea, es un tema que nos preocupa muchísimo a los ambientalista y ruego a la gente que se informe, porque es una nueva lucha como la de la minería, todo lo que ponga en riego el agua implica oposición”.