Ezequiel Palleres (24) apuñaló esta mañana a la productora mendocina María Paula Giglio (33) en la Municipalidad de San Carlos. El joven estaba bajo tratamiento desde el año pasado y según informaron desde el Ministerio de Salud de la provincia, no presentaba antecedentes de violencia. El intendente Jorge Difonso decretó duelo departamental y asueto municipal administrativo hasta el lunes próximo.
El agresor vivía en la Villa Cabecera de San Carlos con su madre y se encontraba bajo tratamiento psiquiátrico, por presentar trastornos severos en el psiquismo y un cuadro psicótico con policonsumo de drogas. Al parecer hacía varios días que no tomaba la medicación y había reincidido en el consumo de estupefacientes.

Desde el Ministerio de Salud explicaron la situación de Palleres y en un diálogo con MDZ Online, el director del Área de Salud Mental, Alberto Carlos Navarro, realizó un repaso sobre la cronología de la atención sanitaria al detenido.
Navarro explicó que el joven «llegó al hospital Tagarelli (en Eugenio Bustos) en junio del año pasado» consultando sobre sus problemas psicológicos, por lo cual «se lo derivó al hospital El Sauce, donde permaneció internado por 20 días». Allí «se lo compensó» clínicamente, y finalmente fue dado de alta al mes siguiente «en buen estado general» para «continuar con su tratamiento y seguimiento en el Tagarelli».
Sin embargo, la situación de Palleres se agravó debido a que, a principios de este año, Palleres «aparece con (un cuadro) de policonsumo» de drogas, según Navarro. Inmediatamente «se lo derivó al CPA (Centro Preventivo de Adicciones) de Tunuyán, donde recibió tratamiento médico psiquiátrico, psicológico y sociofamiliar”.
El funcionario además aseguró que «la mamá (de Palleres) estaba comprometida con el tratamiento y seguimiento, acompañándolo permanentemente». Recordó que el joven «convivía con su madre» y aseguró que «no se le conocen otros vínculos familiares».
También explicó que «el 2 de junio el paciente llegó a una consulta en el Tagarelli y recibió su medicación», siendo el último día que se lo vio en persona, ya que «el 9 de junio, la mamá volvió al nosocomio diciendo que su hijo había perdido o la medicación, que se le dio de vuelta».
El día 12 de junio, el paciente tenía turno en el hospital, pero no acudió ni él la mamá, por lo cual se realizó el seguimiento telefónico», agregó. Lamentablemente se tuvo noticias de Palleres recién hoy, con la noticia del asesinato de Giglio.
Para Navarro, el desenlace fatal pudo haber sido por «una descompensación psíquica del paciente a causa de no tomar adecuadamente la medicación». No tomar los remedios recetados dijo, «puede llevar a una descompensación aguda con alteración grave de su psiquismo en torno a cuadros delirantes y alucinaciones que pueden condicionar su conducta con hechos como este, sin tener antecedentes de agresividad».