El reciente incremento del salario mínimo impactó en el piso de ingreso familiar que se requiere para calificar para los créditos hipotecarios de esta operatoria. La situación se revertiría en los próximos meses.
La suba del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) determinada por el Gobierno Nacional llevó a $ 17.720 el nivel de ingreso familiar mínimo para acceder a Procrear y cambió las reglas de juego para la toma de otros créditos hipotecarios.
La buena noticia, es que aunque en primera instancia la actualización del SMVM hizo más difícil la adquisición de los préstamos, esa situación podría revertirse en los próximos meses, según afirman los economistas.
Requisitos más altos
De acuerdo a lo decretado por el Estado, el Salario Mínimo Vital y Móvil pasó de $ 8.060 a $ 8.860 a partir de julio (10% de aumento).
Eso cambió de forma directa las condiciones para ingresar a Procrear, ya que uno de los requisitos para acceder al préstamo hipotecario subsidiado por el Estado es que el ingreso familiar sea superior a dos SMVM e inferior a cuatro SMVM.
En junio, esa reglamentación implicaba que el ingreso sea mayor a $ 16.120 y menor a $ 32.240. Desde julio, en cambio, dos SMVM son equivalentes a $ 17.720 y cuatro SMVM representan $ 35.440.
Al mismo tiempo cambiaron las condiciones para planes del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV). Actualmente ese organismo ofrece el plan “Vivienda Social” para quienes tengan ingresos de menos de dos SMVM y “Vivienda=Trabajo” para quienes ganen más de dos SMVM.
Es decir, que el punto de quiebre entre un plan y otro pasó de $ 16.120 a $ 17.720.
En ese caso la suba del SMVM puede resultar conveniente para algunas familias, ya que el plan para hogares con menos recursos ofrece mayores facilidades de pago.
Otro cambio que puede observarse desde este mes tiene que ver con la tarifa de gas. El Gobierno ofrece “tarifa social” a quienes tengan un nivel de ingreso igual o menor a dos Salarios Mínimos Vitales y Móviles. Por lo tanto, el techo para acceder a ese beneficio se incrementará 10%.
Los más perjudicados
La suba del Salario Mínimo Vital y Móvil afectó principalmente a aquellas familias que están justo en el límite del nivel de ingreso mínimo para acceder a un crédito de Procrear.
Es un problema que deben enfrentar por ejemplo los usuarios que aspiran a conseguir un préstamo de la nueva línea para “Construcción”-
De acuerdo a la información publicada en la página oficial de Procrear, cerró una etapa de inscripción el 28 de junio y abrió una nueva el lunes 3 de julio.
Por las razones que fueron explicadas anteriormente, una familia con un ingreso mensual de $ 16.800 podía anotarse en la línea de Construcción en los últimos días de junio, pero no puede hacerlo en la nueva etapa.
Compensación salarial
Diferentes economistas consultados reconocieron que la suba del SMVM hará más difícil el acceso a Procrear para muchas familias, pero aseguraron que “en pocos meses ocurrirá el efecto contrario y la toma de créditos será más fácil”.
Esa afirmación no tiene que ver con una modificación de los requisitos mínimos para la toma de préstamos, sino con los aumentos salariales acordados en paritarias.
Esa fue la postura por ejemplo de Rodrigo González, economista de Fundación Ideal, quien opinó que la suba del 10% del Salario Mínimo Vital y Móvil fue modesta y no será distorsiva para la toma de créditos.
“Por el contrario, los acuerdos firmados por empresas y sindicatos indican que los sueldos del sector privado subirán un 22% entre el primer y el segundo semestre”, comentó.
“Eso quiere decir que los incrementos salariales privados estarán en promedio 12 puntos porcentuales por encima de lo que subió el SMVM. Por lo tanto, en cuanto se concreten los aumentos de sueldos, la toma de préstamos hipotecarios será más flexible”, indicó.
Coincidió con esa lectura el economista Sebastián Laza. “Existe un atraso relativo del SMVM en relación a los sueldos privados. Por eso, aunque en un principio se endurezcan los requisitos para acceder a Procrear, es cuestión de tiempo para que el ingreso a los créditos se vuelva más flexible”, señaló.
El economista Raúl Mercau se mostró de acuerdo con Laza y González, pero destacó principalmente el efecto negativo de la “insuficiente” suba del Salario Mínimo Vital y Móvil.
“Por ley, los trabajadores que cobran el mínimo tuvieron un aumento del 10%, pero aun así siguieron por debajo de la línea de la pobreza”, cuestionó.
Cabe recordar, que según la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza, la Canasta Básica Total (CBT) para una familia tipo 2, hoy es de $ 12.997,93. Por debajo de ese nivel de ingresos una familia es considerada “pobre”.
Fuente: Los Andes