Esta mañana se conocía la noticia de que un caño de las cloacas se había roto y que los residuos caían al arroyo Guiñazú, ubicado sobre la ruta 40 de ese departamento.
Según expresaron en ese momento algunos vecinos de la zona, los olores que producía esta problemática eran sumamente nocivos, por lo que pedían una rápida solución.
Alejandro Coll, Jefe de Comunicación de Aguas Mendocinas, explicó a El Cuco Digital que el problema había suscitado, primeramente, por un hecho vandálico que tuvo como consecuencia el desborde del caño dañado sobre dicho arroyo.
Afortunadamente, y según aseguró el funcionario, los trabajos de reparación fueron terminados en el transcurso de la mañana de este jueves.