Según informó el diario Los Andes, la comuna de Tunuyán intercedió para destrabar los $ 150 millones como parte del salvataje del Nación. Ante el gremio, la firma se comprometió a pagar desde mañana parte de lo adeudado.
El trámite empezó a destrabarse el fin de semana y, según quienes participaron de la reunión definitoria, la ayuda financiera por $ 150 millones de la Nación para Alco-Canale comenzará a efectivizarse a partir de hoy. Las primeras obligaciones a cancelar son los salarios de 1.400 trabajadores, pendientes desde hace casi 2 meses, en medio de la reactivación de las tres plantas que el grupo empresario tiene en Mendoza.
La señal surgió de una reunión realizada en la sede del banco Nación en Buenos Aires, con presencia de los popes del grupo empresario en crisis y representantes sindicales. El intendente de Tunuyán, Martín Aveiro, se reunió con ambas partes por separado para comprender mejor la problemática y colaborar con la posibilidad de que la firma pudiera cerrar el acuerdo para que el fondeo comience a hacerse efectivo esta semana.
Según anticiparon desde el Sindicato de la Alimentación Mendoza, el compromiso inicial es que desde mañana -miércoles 18- se acredite del 70 por ciento al 90 por ciento de los salarios adeudados (5 quincenas desde setiembre) en las cuentas de los trabajadores. El resto debería terminar de completarse hasta el viernes 20.
“La primera transferencia de fondos a la empresas empezó a hacerse hoy (por ayer), con lo cual deberían ponerse al día hacia el fin de semana”, aseveró el secretario gremial Oscar Aciar. No obstante, la empresa no confirmó esta versión
En este contexto, el intendente Aveiro aclaró que la comuna no controlará el cumplimiento o no del acuerdo sino que ese rol lo cumple el Ministerio de Economía de la Nación, encargado de la ayuda otorgada. “Con la (senadora electa) Anabel Fernández Sagasti buscamos interceder para que la firma lograra entregar el diagnóstico de su situación”, aclaró Aveiro.
Menos claro es el panorama para los proveedores de materia prima. “Estoy por llamar a la empresa para saber cómo sigue esto”, decía expectante uno de los proveedores que más años lleva vendiéndole fruta a la firma y, en este sentido, uno de los más afectados por el corte de la cadena de pagos.
Conforme el proceso de negociación fue endureciéndose en las últimas semanas producto de la falta de señales de la Nación y por exigencias del banco (que había sido acreedor del concurso en el cual estuvo sumido Canale desde 2010), desde el seno de la compañía intentaron darle el mayor hermetismo posible al acuerdo cerrado ayer; siempre según la voz del Sindicato.
De hecho, tras las aseveraciones del gerente general de Alco, Roberto Lamm, en las que aseguraba que “los salarios son la prioridad” y que se avanzaba en la reactivación de las plantas agroindustriales, Camilo Carballo (h), miembro del directorio y de la familia que es accionista controlante de la empresa, no dio más precisiones sobre el futuro de la compañía pese al pedido de Los Andes.
Es que desde la firma se prefería mantener en privado el avance de las negociaciones. Al directivo le cayó mal una advertencia del sindicato: “Sólo le anticipamos que estamos dispuestos a tomar medidas drásticas si luego del miércoles la gente no cobra”, dijo el delegado Alberto Miranda.
Lo cierto es que el 50 por ciento del fondeo convenido ($ 75 millones) debe ir a cancelar los haberes de los empleados que se desempeñan en todas las plantas que Canale tiene. Son tres en Mendoza (Tunuyán, Tupungato y San Rafael), y las restantes entre Río Negro, Catamarca y provincia de Buenos Aires. Inmediatamente después, en la lista de prioridades de pago aparecen la materia prima y otros insumos.
Fuente: diario Los Andes