En agosto quedaría habilitado el primer tramo de la doble vía que permitirá un tránsito mucho más rápido y seguro entre el Valle de Uco y la ciudad de Mendoza. El proyecto original fue mejorado con obras especiales en Zapata y la entrada de Furno.
La construcción de la doble vía Luján – Tunuyán ya entró en su etapa final. Con más de un 60 por ciento de la obra terminada, las expectativas radican en que, el primer tramo estaría siendo habilitado en el mes de agosto. Se trata de un recorrido de 16 kilómetros, desde Anchoris hasta el retorno que se construye a la altura de la Cruz Negra.
La doble vía es una de las obras más importantes de los últimos tiempos. Con una extensión de más de 29 kilómetros, la construcción beneficiará a unos 7.500 vehículos que circulan a diario por la Ruta Nacional 40, permitiendo un tránsito más seguro y rápido, e impactando de forma directa en la producción y los servicios del Valle de Uco.
Los primeros trabajos arrancaron en abril de 2011, con un presupuesto inicial de $183 millones. Sin embargo, diferentes modificaciones y mejoras han resultado en que la obra demandará un presupuesto final cercano a los $300 millones. Las obras incluyen una calzada de 7,5 metros, banquinas de concreto asfáltico, dos rotondas, cuatro puentes (en los arroyos Los Chañares Norte, Los Chañares Sur, Tierras Blancas y La Estacada), y señalización horizontal y vertical en ambas calzadas.
Dos de las mejoras más importantes sobre el proyecto original se realizan en el ingreso a Tunuyán. Por un lado, en Zapata, se trabaja sobre la refuncionalización de la rotonda que deje proyectado el desvío de la ruta Nacional por el costado Este del centro departamental. En este paraje también se construyen en forma simultánea los paradores de Iscamen y Gendarmería, proyectándose que en el lugar también funcionen la delegación Canes de la Policía y una balanza para control de cargas. La otra mejora estructural en el ingreso tunuyanino se encuentra en la intersección de Furno. Este sector constará de iluminación y defensas de hormigón para separar los dos carriles.
Según explicó Jorge Quinteros, subadministrador de Vialidad Provincial, las obras han retomado el buen ritmo después de algunos inconvenientes relacionados con la provisión de materiales. “El incendio de la planta de YPF de Beriso, sumado a las inundaciones de Buenos Aires, provocó demoras en la entrega de material, pero el suministro ya se ha normalizado, por lo que los trabajos continúan a buen ritmo”, afirmó el funcionario, quien destacó que se “espera entregar los primeros 16 kilómetros, entre Anchoris y la Cruz Negra, en el mes de agosto”.
La doble vía Luján – Tunuyán ha sido una de las obras más requeridas y esperadas por la gente del Valle de Uco. En poco tiempo, será una realidad que, sin duda, mejorará significativamente no solo el tránsito y la seguridad vehicular, sino también la potencialidad y desarrollo de la región.