Están a cargo de personal del Departamento General de Irrigación. Consisten en la puesta en marcha de mejoras en las compuertas derivadoras del Dique y benefician a más de 18 mil hectáreas bajo riego.
Entre las acciones emprendidas, precedieron a la derivación del caudal que conduce el río Tunuyán en su margen derecha, para dejar seca la zona de trabajo. Luego avanzaron con el arenado de compuertas, revisión y cambio de burletes que permiten el óptimo funcionamiento y operatividad de los sistemas de derivación.
Los distintos trabajos son realizados por el Departamento General de Irrigación, a través de personal de la Subdelegación de Aguas del río Tunuyán Superior. Se llevan a cabo con maquinaria propia y la colaboración de la Dirección de Hidraúlica, dependiente del Ministerio de Infraestructura y Energía.
“En nuestro Plan Agua 2020, hacemos hincapié en la conservación y mantenimiento del sistema porque entendemos que estas tareas de preservación son muy importantes para un funcionamiento eficiente de la red hídrica y un uso eficiente del agua”, explicó José Luis Álvarez, superintendente General de Irrigación.
El área de beneficio de las tareas en el Dique Valle de Uco, alcanzan las 18.000 hectáreas bajo riego, donde se destacan cultivos de frutales y vides. Otras obras que se llevan a cabo en la cuenca, son la limpieza general de cauces, hijuelas de riego y la impermeabilización de los canales Rincón y Montenegro