Esta historia sirve como homenaje a todos los empleados municipales. Ramón Espilocín ejerce esta labor con mucho cariño y compromiso desde hace 15 años en Tupungato.
La colega, Alejandra Adi del Diario UNO, entrevistó a Ramoncito por el día del empleado municipal.
Uno de los diplomas que exhibe lo identifica como el “mejor fotocopiador” de todas las municipalidades. Sin embargo, basta conocer un poco este departamento y preguntar por él a cualquiera de los vecinos para descubrir que Ramoncito también es deportista y campeón de bochas, bailarín de Vendimia, conocedor de todo lo que acontece en su pueblo, novio de cualquiera de las reinas electas recientemente y, ante todo, uno de los más famosos y queridos en la comunidad. Hoy es el día del empleado municipal y en la historia de Ramoncito está el homenaje a todos los que honran la labor en cada comuna.
“Soy el encargado de fotocopiar todo, sello las carpetas y ayudo a Flavia”, expresó Espilocín mostrando su sello personal y señalando a una de sus compañeras, de quien dice ser como su asistente. Tener Síndrome de Down no impidió que sea contratado para trabajar en la función pública en el 2001, ya que hoy se ha ganado el cariño y el respeto de todos sus compañeros.
“Es muy detallista en su trabajo. Se fija en que cada hoja salga prolija y hasta que no sale bien no termina. No le gusta estar sin hacer nada; si no tiene que hacer fotocopias, busca hacer algo más”, relató De la Reta, con quien trabaja en el área de Asesoría Legal de la Municipalidad.
Su responsabilidad queda demostrada en su elegancia y puntualidad para asistir al trabajo. “Es más responsable que muchos. Es re perfeccionista. Está acá a las 7 de la mañana y se va a la 1 del mediodía y a veces hasta más tarde porque se queda ayudando a alguien”, contó Mario Nebot.
Sin embargo, su mañana de trabajo se distribuye en varias labores. Además de ir con su cuaderno debajo del brazo recorriendo cada oficina del edificio municipal adonde asiste a empleados con las copias o documentación, Ramoncito saluda y charla con cada persona que ingresa al edificio municipal, comentando todas las novedades del departamento.
“Todos los días leo el diario y tengo todo guardado”, afirmó mientras abría una ordenada caja donde guarda sus más grandes tesoros. Ahí están todos los recortes de las notas regionales más importantes –él participa en todos los eventos sociales e inauguraciones–, los autógrafos recolectados en cada Vendimia, una docena de medallas ganadas en distintos eventos deportivos, diplomas e históricos documentos donde se ve reflejada su pasión por el fútbol: como una foto con Diego Maradona, tomada hace muchos años en la cancha de Andes Talleres, y el certificado del club Godoy Cruz donde lo nombran socio honorario tombino.
Ambición pública
“¿Te acordás cuando Ramoncito se postuló para ser intendente?”, señala Patricia desde otro escritorio. Es que Ramón en época de elecciones siempre se interesa por lo que pasa en el mundillo político y participa aportándole su cuota de humor.
En el 2011 empapeló la ciudad con un panfleto en el que aparecía su rostro como postulante a intendente, además de trucar otras imágenes que repartió entre los vecinos en las que aparecía al lado de figuras como la presidenta Cristina Fernández o el papa Francisco.
Ramón Espilocín (40 años)
Vive junto con su mamá Olga Isuani. Es hermano de María y Sandra Espilocín y tío de Victoria, Juan Martín, Leonel y Florencia.
Es de Boca Juniors –“siempre que gane”–, de la escuela del DT Carlos Bianchi.
Su novia actual se llama Micaela y dicen que es una de las reinas de la Vendimia de San Carlos.
Trabaja en la Municipalidad de Tupungato desde 2001.
Fuente: Alejandra Adi (Diario UNO)