Además de los reclamos por la carne que durante las pasadas semanas tenía un fuerte olor a creolina, muchos clientes reclamaron por fiambres en mal estado, y el mal olor y la higiene de las sucursales. Desde la gerencia de la empresa nadie dio ninguna respuesta, mientras solamente los empleados debieron hacer frente a los reclamos y enojos de los clientes.
En las últimas semanas numerosos clientes de supermercados Átomo en Valle de Uco se quejaron por el mal estado de algunos productos adquiridos y las deficiencias en la higiene que genera olores desagradables en varios de los locales. Los reclamos, se hicieron sentir a través de los medios de comunicación, en las redes sociales, y formalmente a través de denuncias en la Dirección de Defensa del Consumidor.
La mayor cantidad de reclamos fue por la carne vendida durante las semanas pasadas que, según el testimonio de algunos clientes, tenía un fuerte olor a creolina o lavandina. Al respecto, muchos utilizaron su Facebook para denunciar la situación, mientras otros radicaron directamente la denuncia. Sin embargo, algunos de los afectados, solo decidieron desechar la carne comprada y quejarse en los círculos cercanos. El testimonio de Luciana, una ingeniera de la región, es referencial, quien contó que “tiró la carne de milanesas porque tenía un fuerte olor a lavandina”. A los clientes que reclamaron y devolvieron la carne, el supermercado les cambió el producto. Sin embargo, las respuestas solo fueron de los empleados quienes, además de recepcionar las críticas y molestias de los clientes, en algunos casos también deben testimoniar en los casos de denuncias en Defensa del Consumidor. Desde la empresa no hubo ningún comunicado oficial, por el contrario, las gerencias responsables, o los dueños de la empresa resultan “invisibles” para los clientes afectados.
Diario El Cuco también recepcionó varias quejas de clientes del supermercado, no solo por el estado de la carne vendida semanas atrás, sino también por fiambres en mal estado y por los frecuentes olores nauseabundos que se sienten en algunas sucursales. “Compré bondiola, y aunque las fechas de envasados solo databan de dos días atrás, el fiambre estaba totalmente podrido”, comentó María, quien devolvió el producto y recibió una nota de crédito por el importe.
Desde el supermercado nadie dio una respuesta oficial, aun cuando se realizaron numerosas llamadas a la casa central de la empresa ubicada en Álvarez Condarco de Las Heras. Nadie se responsabilizó de lo sucedido, o por lo menos explicó cuáles son los motivos por los que se presentan este tipo de situaciones que no solo molestan a la población, sino que principalmente son un riesgo para la salud.
Desde Defensa del Consumidor explicaron a este medio que ante una situación como las planteadas por consumidores, se debe pedir el libro de quejas que por ley debe haber en cada sucursal y allí dejar sentada la disconformidad, de esta forma la Dirección de Defensa del Consumidor puede entrar en conocimiento de la situación. No obstante, desde la Dirección correspondiente al Estado provincial informaron que la cadena Átomo es la más denunciada por mal estado de alimentos, entre otras infracciones: “la cadena es la de mayor denuncias por este tema, tiene varios procesos de sumarios y multas” sostuvieron desde la entidad.
Las situaciones denunciadas no son solo molestas para los clientes del supermercado, sino que también generan un malestar entre los empleados que son quienes terminan “poniendo la cara” ante situaciones bastantes difíciles. “Siempre son los empleados quienes se llevan los malos tratos, quienes deben responder a las críticas de los consumidores” afirma Mario, un cliente del supermercado, y agrega “los empleados no solo terminan dando explicaciones que debería dar la empresa, sino que también tienen que hacer piruetas para mejorar la atención, por ejemplo, los cajeros hacen malabares con el cambio, y terminan pidiendo disculpas a clientes molestos por la demora en la entrega de los vueltos”.
Mientras tanto, y a días de las fiestas de fin de año, muchos dudan en la realización de las compras navideñas, sobre todo por el riesgo que implica comprar productos en dudoso estado. Habrá que esperar si hay alguna respuesta oficial, y el mejoramiento de las condiciones.
2 comentarios
Y.. esto pasa cuando solo hay un super de una sola empresa. El VEA es mucho mejor pero hay que irse a EB, cuando abriran uno aca??.
Pero esto pasa en todo nivel en estos pueblos, hay locales o negocios que como al no tener competencia o la que hay es igual o peor entonces, para qe mejorar??
Adhiero a las expresiones de la nota periodistica, agrego: el desorden, las pilas de cajas entre las gondolas q dificultan la circulacion, el impedimento de sacar los carritos con las compras, las personas q hacen la limpieza entre la gente q esta seleccionando los productos a comprar, etc, etc.
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