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Preocupación en Mendoza por la crisis hídrica: el embalse de Potrerillos está al 55 %

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El dique Potrerillos está a la mitad de su capacidad y se espera una fuerte crisis hídrica.

Desde Irrigación indicaron que el caudal que está entregando el río Mendoza es de 19 metros cúbicos por segundo, cuando lo normal es 33 m3.

«Será un año hídrico muy difícil», señaló el ingeniero Ricardo Nordenstorm, Subdelegado del río Mendoza, quien brindó una explicación técnica ante el triste panorama que arroja el embalse de Potrerillos, que se puede apreciar a simple vista.

«Hay menos agua. El embalse de Potrerillos está al 55 %. El año hídrico, que finaliza en octubre del año que viene, va a ser muy difícil», anticipó el ingeniero. «Pero no es Potrerillos el único embalse complicado. El Carrizal está al 46 % de su capacidad, Nihuil y Valle Grande al 40 % y cerca del límite operativo inferior, y Agua del Toro y Reyunos, al 67 %».

La situación de sequía y escaso escurrimiento de agua, tal como anticipó Irrigación días atrás cundo presentó el Pronóstico de Escurrimiento, es muy grave.

Nordenstorm dio más datos. «El caudal que está entregando el río Mendoza es de 19 metros cúbicos por segundo, cuando habitualmente eroga 33 m3/seg. Es sensiblemente inferior. Y tuvimos que administrar y restringir el riego, para que alcance para todos, porque la demanda no baja» explicó.

Agua cuidada

Según indicaron desde Irrigación, a pesar de que sólo ingresan 19 m3, el embalse sigue entregando al sistema aguas abajo entre 33 y 34 metros cúbicos por segundo. Pero se hace distinto. «De las 66.000 hectáreas bajo riego, se riegan por turnos primero 33.000 y luego el resto. Los turnos son de cuatro días. Esta semana, los turnos se achicaron a cada tres días, agua para 20.000 hectáreas cada vez; lo que ha espaciado los períodos de riego en las fincas. Las plantas no están sufriendo, también es cierto que cuando el agua escasea, el regante riega mejor», explicó Nordenstorm.

«Si no fuera por esta administración que acordamos con los Inspectores de Cauces, no llegábamos a noviembre con el agua», dijo el ingeniero.

La mayoría del recurso es para riego, y unos 7 m3/seg del caudal son para consumo domiciliario, que no ha sufrido restricciones.

«Con el agua que se está embalsando ahora, hay que aguantar el verano e incluso la próxima primavera, porque el agua de los deshielos empieza a llegar en diciembre», finalizó para explicar la gravedad de la crisis.

 

Fuente: Los Andes- Fotografía Irrigación