Polémica por la explotación de animales en el centro de Tunuyán

A pesar de que los ponis y las llamas son animales domésticos, y por lo tanto su tenencia no es considerada ilegal, la explotación económica en la vía pública de estos ejemplares volvió a generar debate: ¿qué trato merecen estos animales y qué es lo mejor para ellos?

Muchos son los malos tratos que algunos animales sufren en diversos ámbitos, cuando son sometidos a situaciones que lógicamente no corresponden a su condición animal. Hace poco, en el Valle de Uco la propiedad sobre diversos animales se puso en debate con la aparición de un puma en una vivienda de Tupungato. Ahora, el tema se vuelve a poner en cuestión al observarse  por las calles céntricas de Tunuyán, la exhibición con fines económicos de varios ponis y una llama.

Sin ánimos de cuestionar las estrategias laborales de los dueños de estos animales, se consultó a especialistas respecto a las controversias generadas en la región y, en este caso en particular, sobre el ambiente adecuado para los ejemplares y si existe algún tipo maltrato. El gran marco legal es la ley 14.346, conocida como la “ley Sarmiento”.

“Cualquiera puede denunciar un maltrato en una comisaría ya que existe la ley 14.346 que vela por el cuidado de los animales. Una vez realizada, debe corroborarse si existe o no maltrato y de haberlo debe corregirse esa infracción”, manifestó el vicepresidente de la Fundación Cullunche, Eduardo Furlán.

Furlán explicó que el fin protector de la normativa se amplía cuando se trata de animales silvestres y no cuando se trata de animales domésticos. En estos últimos hasta la provincia tiene incidencia en su destino, como sucedió con la hembra de puma hallada en Tupungato.  “Suelen ser normales las denuncias que nosotros radicamos en este sentido, algunas toman curso pero otras no. El mal trato animal es común pero existen diferencias cuando son silvestres”, comentó.

Caballos, ponis y hasta una llama pueden estar bajo la tenencia de un particular por ser considerados animales “domésticos”. Sin embargo, el vicepresidente de la Fundación Cullunche insistió en que es necesario que las organizaciones y hasta los municipios se interesen en el bienestar de estos especímenes.

Animales explotados con fines económicos. Necesidades humanas y derechos animales, puntos que merecen un debate y que cada tanto encontramos a la vuelta de la esquina.