El gobernador prepara un nuevo proyecto de presupuesto con números «adecuados a la realidad».
A pesar de que sigue con su bota, tras la operación de tibia y peroné, esta mañana el gobernador Francisco Pérez se tomó su tiempo para dialogar con los medios acerca de la “transición” y los números de la provincia, que tanto le reclama el radicalismo.
El mandatario dialogó tras participar del acto por el Día de la Memoria Activa, que se realizó en conmemoración de las víctimas del atentado a la AMIA.
“Hay que llegar a un acuerdo político para acordar un endeudamiento que sirva para cerrar los números de este año”.
Pérez también quiere una transición «tranquila», aunque esa tranquilidad se rompe cada vez que el gobernador electo, Alfredo Cornejo, tiene dificultades para acceder a los números «reales» de la Provincia. Sin embargo, el gobernador prefirió no polemizar y aseguró que «nada se esconde”.
De hecho admitió que la recaudación cayó ocho puntos, lo que equivale a unos 1.500 millones de pesos y que la deuda con los proveedores asciende a 715 millones. Es por eso que el Ejecutivo trabaja en el armado de un nuevo presupuesto, cuyo piso para pedir endeudamiento serán esos 1.500 millones.
Pérez busca una pauta de gastos que refleje los números reales y las paritarias. En ese sentido advirtió que su gestión no entregará un “cheque en blanco para las necesidades del futuro Gobierno”. “Vamos a plantear un presupuesto lo más cercano a la realidad posible, la idea es trabajar en un endeudamiento para terminar el año”, sostuvo.
El gobernador quiere asegurarse el dinero para diciembre, el mes más complicado financieramente y quiere garantizar el salario de noviembre y el aguinaldo. Para eso analiza la posibilidad de renegociar mejores condiciones con el Banco Nación para poder pedir un préstamo. La sugerencia de la UCR era que el Gobierno pidiera 6.000 millones de pesos al agente financiero estatal para cubrir todo lo que resta del año y asegurarse así el dinero para pagar los sueldos.
“Hay que llegar a un acuerdo político para acordar un endeudamiento que sirva para cerrar los números de este año”, añadió Pérez, aunque también dijo que Cornejo aún no ha dicho “cuánto necesita para funcionar”.
El gobernador intentó mostrarse abierto y predispuesto al diálogo e incluso aseguró que le ofreció a Cornejo suspender el proceso licitatorio del transporte. En cuando a la prórroga de la licitación de las cámaras de seguridad que pidió la UCR, explicó que es “imposible porque se caería el contrato vigente”.
“Acá no va poder jubilar a nadie”
Además Pérez echó por tierra las intenciones de Cornejo de incentivar las jubilaciones de los estatales provinciales para reducir la planta de personal Estado.
“Acá no va a poder jubilar a nadie porque ya jubilamos a 4.200 agentes, nadie se va a retirar de manera voluntaria porque lo ofrecimos y no se dio”, expresó el gobernador, en referencia a unas de las medidas más controversiales que anunció Cornejo que tomará apenas se instale en la Casa de Gobierno: reducir 25% la cantidad de empleados estatales, cuestión que a su vez repudiaron los gremios del Estado. Además el gobernador aseguró que la planta de estatales en su gestión creció menos del 3%.
Por otra parte el gobernador aseguró que el 10 de diciembre tendrá trabajo cuando se desempeñe como abogado con el “primer daño y perjuicio” que piensa realizar con quienes hacen “denuncias falsas, rídiculas y payasescas”. Eso en respuesta a las declaraciones del candidato a diputado nacional del ARI, Gustavo Gutiérrez, que dijo que Pérez debía ser procesado por otorgar prórrogas al la petrolera Chañares Herrados, que no cumplió con la producción.
Fuente: diario El Sol
Un comentario
Estos kakitas, dan risa… parece que no entendio que ya te fuistes chiquito… Que cheque podes dar vos, Atorrante… Anda.. mirala desde afuera kakita 6o% de mendocinos te mandamos a la cucha.. Al que no le gusta.. que se vaya a vivir a una villa a Bs As, donde parecen estar comodos los K.
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