Los pasajes más baratos al país vecino se venden a $ 950, lo que supera en $ 350 el precio más accesible de diciembre de 2016.
Las empresas de micros de larga distancia ya están trabajando con precios de temporada alta. Las promociones son escasas y para viajar a Chile habrá que pagar como mínimo $ 850 para Santiago y $ 950 para Viña del Mar.
De acuerdo a un relevamiento realizado por Los Andes en base a los precios de Andesmar, Cata Internacional, Chevallier, El Rápido, San Juan-Mar del Plata y Central Argentino, el valor más accesible de los boletos de Mendoza a Santiago y Viña del Mar era de $ 600 el verano pasado y alcanza los $ 950 en esta temporada. Por lo tanto, hubo un aumento de $ 350 por pasaje (58% de incremento).
A ese valor se le podría sumar otro ajuste temporal en las próximas semanas. Así lo reveló Daniel Jaime, gerente General de Cata Internacional, quien explicó que en las fechas clave de fin de año, como los días previos a Navidad y Año Nuevo, “podrían aumentar entre $ 50 y $ 100 los pasajes a Chile”.
También se encarecieron los tickets a Mar del Plata, aunque en caso la suba fue menor a la inflación. En diciembre del año pasado se debían pagar como mínimo $ 1.200 para viajar en micro de Mendoza a la Costa Atlántica y este año el valor más económico es de $ 1.365 (14% de aumento).
Considerando que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el Gobierno de Mendoza acumula un incremento del 21,62% en lo que va del 2017, se puede asegurar que lo boletos más accesibles a Mar del Plata bajaron de precio en términos reales.
Sin embargo, esa condición no se cumple en todos los casos, ya que resulta muy difícil conseguir boletos de $ 1.365. En muchos días y horarios solo hay disponibles pasajes de $ 1.450 para ir a Mar del Plata.
Similar es el caso de los pasajes a Córdoba, que costaban $ 658 en diciembre de 2016 y se venden a $ 770 en esta temporada (17% de suba). No obstante, hay pocos pasajes disponibles a ese valor. La mayoría de los boletos a ese destino se venden a $ 1.100.
Ocurre lo mismo con los pasajes a Rosario, que se ofrecen en valores promocionales de $ 1.150, pero casi todos los pasajes a la venta cuestan $ 1.450. Los tickets de oferta aumentaron 15% en relación al año pasado.
Es muy particular el caso de Buenos Aires. Quienes deseen vacacionar en la capital de país deberán pagar esta temporada un valor mínimo de $ 1.050, mientras que en diciembre del año pasado el boleto más económico se vendía al público a $1.330. Es decir que hubo una baja del 21% en el valor del boleta.
De todas formas, al igual que ocurre con los otros destinos, los tickets de $ 1.050 son limitados y la en la mayoría de los días y horarios el boleto más barato cuesta $ 1.535, lo que significaría un aumento del 15% con relación al año pasado.
Aumentos contenidos
Con la excepción de los pasajes a Chile, el resto de los destinos relevados aumentaron menos que la inflación en el último año. Según los empresarios del sector, eso es consecuencia directa del achicamiento del mercado.
«La mayoría de las empresas redujo la cantidad de servicios. Al haber menor oferta, se intenta captar mayor volumen a través de precios más accesibles», comentó Daniel Jaime, de Cata Internacional.
Se mostró de acuerdo Sergio Caruzzo, titular de la empresa Central Argentino. «La competencia aérea obligó al transporte terrestre a reducir sus frecuencias y contener sus precios. Por eso se ven aumentos por debajo del índice inflacionario», señaló.
«En nuestro caso, para contrarrestar el efecto negativo de los aviones, estamos reforzando nuestros servicio en tramos cortos, donde las aerolíneas por ahora no llegan. Otras empresas están tomando medidas similares», agregó Caruzzo.
Fuente: Los Andes