Con 25 votos a favor y 18 negativos, Diputados dio media sanción a un proyecto de ley de Aldo Vinci (PD) por el cual se incorpora como inciso W del artículo 57 del Capítulo VI de la Ley 6082 que prohíbe en la vía pública: “fumar a los conductores de vehículos de propiedad privada que se encuentren en circulación, transporten o no a otros ocupantes y en vehículos propiedad del Estado Provincial, entes descentralizados y autárquicos, empresas de propiedad o con participación estatal en cualquier grado y los de propiedad particular afectados al servicio del Estado Provincial”.
El legislador destacó en su iniciativa, entre otros fundamentos, que “según estudios mundiales (Organización Mundial de la Salud 2012) el humo del cigarrillo en el interior de los coches (vehículos) está relacionado con los casos de bronquitis crónica en niños”.
En Argentina fue sancionada el 2 de junio de 2011 una Ley Nacional Antitabaco (nombre popular). El nombre correcto es «Regulación de la publicidad, producción y consumo de los productos elaborados con tabaco». Se trata de la Ley Nº 26.687, promulgada el 13 de junio de 2011.
Cabe recordar también que en la Cámara, en el mes de mayo de 2003, Argentina suscribió en Ginebra el Convenio Marco para el control del tabaco con el principal argumento de proteger la salud pública, bajo el reconocimiento por parte de los Estados miembros de la Organización Mundial de Salud. En 2007 además, se estableció el Programa Nacional de Control de Tabaco, prohibiéndose el consumo y/ó venta a menores de edad.
Vinci recordó también que la ley provincial 7790 “prohíbe fumar en todos los espacios cerrados con acceso público, tanto en el ámbito público o privado de la provincia, a excepción de patios, terrazas, balcones, espacios al aire libre, centros de salud mental, salas de fiestas cuando sean utilizadas para eventos de carácter privado, o salas de juegos.
Mencionó luego otros antecedentes legislativos similares, como es el caso de Córdoba, e internacionales como Irlanda y los Países Bajos. Además, según un estudio publicado el día 15 de octubre de 2012 por la Organización Mundial de la Salud: fumar en el auto crea una tasa de polución de partículas finas tres veces superior a la máquina permitida por la OMS y perjudica la salud.
El diputado consideró que “debe tenerse particularmente en cuenta que, más allá del perjuicio a la salud que implica el humo de cualquier tipo de cigarrillo, a personas de cualquier edad, en un ambiente extremadamente cerrado como es el caso del interior de un automóvil, el solo hecho de sostener un cigarrillo encendido entre los dedos de la mano de quien conduce un automóvil, implica un peligro inminente de accidente. Una braza que se cae entre las ropas, un cigarrillo que se rompe y cae al asiento o piso del automóvil, o una quemadura por distracción, produce una brusca maniobra del conductor para tratar de solucionar el problema de inmediato”.