Debido a la situación económica actual, las tres comunas regionales han iniciado medidas para incrementar sus ingresos y reducir algunos gastos.
En ese marco, y con un cambio de signo político en el gobierno, Tupungato ha dejado cesantes a 154 empleados municipales. Según el actual intendente, se revisarán los contratos y posiblemente algunos continúen con su trabajo. Además Soto ha decidido promover un recorte de gastos que incluye combustible, asesores, teléfonos, entre otros. Mientras tanto, el concejal opositor Pablo Leites (PJ), ha convocado a diferentes sectores para determinar cuál es la situación municipal y cómo continuará la comuna.
Tunuyán, el departamento que continúa con la intendencia de Martín Aveiro, busca incrementar las tasas municipales. Esta comuna es la única del Valle de Uco que no recibe regalías petroleras, por lo que su situación económica siempre es más dificultosa que los otros dos municipios. Ante la propuesta de incremento impositivo, dentro del marco del nuevo presupuesto, los concejales radicales han mostrado su disconformidad, por lo que aún no se llega a ningún acuerdo.
En San Carlos, la situación parece menos traumática en cuanto a la reducción de gastos, ya que Jorge Difonso, en su tercer mandato como intendente ha decidido impulsar una reducción de los cargos jerárquicos, fusionando algunas áreas de gobierno y un congelamiento de sueldos de funcionarios y dietas de concejales. Al respecto, este último punto viene siendo tratado con los concejales opositores, como recurso para paliar la situación complicada que se avisora para los próximos meses.
(datos de información: diario Los Andes)