Carta al Peronismo Sancarlino por Juani Jofre. «El movimiento peronista nació y se hizo grande por ser amplio, inclusivo, plural y popular. Tenemos la obligación de ser reflexivos y autocríticos, porque si no seguiremos repitiendo errores”.
Me tomo el atrevimiento de escribir porque me siento peronista, sin importar los “partidos”, sino el movimiento peronista o justicialista… o más amplio aún, el movimiento nacional y popular.
Aunque seguro ya habrá quien no lea esto porque diga “este no es peronista”, que es una descalificación a la que nos estamos malacostumbrando… todo peronista cree que tiene la vara para medir y juzgar quién es y quien no es peronista. Primer gran error, porque justamente el movimiento peronista nació y se hizo grande por ser amplio, inclusivo, plural y popular. Incluyendo al que se acerca, en vez de expulsarlo.
Pasaron las elecciones generales departamentales, y hemos sufrido una derrota contundente en los números. Difonso nos duplicó en cantidad de votos, nos sacó una abismal diferencia de cinco mil votos. Como peronistas somos respetuosos de la decisión del soberano, y hay que reconocer la categórica victoria de Difonso.
Lo que me preocupa es lo que hacemos o decimos nosotros.
Vengo principalmente del ámbito educativo y del ámbito del fútbol. En esos ambientes he aprendido que lo único que mejora tus prácticas, es ser reflexivos y autocríticos, sin llenar de culpa a los ajenos. En el fútbol culpamos al árbitro, y al próximo domingo volvemos a perder porque cometemos los mismos errores. En el aula culpamos al alumno, y a la próxima clase volvemos con mala cara y una tarea monótona.
El peronismo sancarlino tiene hoy la obligación de ser reflexivo y autocrítico, porque si opinamos en caliente, revoleando culpas para todos lados sin aceptar lo que no hicimos o lo que hicimos mal, seguiremos repitiendo errores.
En toda Mendoza hay una tendencia a fogonear las diferencias internas del peronismo. Los políticos conservadores encolumnados atrás de Cornejo, asociados a sectores de la prensa comercial como MDZ, Mendoza Post, Los Andes, Andrés Gabrielli, etc, van a hacer todo lo posible para separarnos… saben muy bien que el peronismo unido, no pierde la provincia. El último ejemplo concreto de esto, es la nota de Padilla en Mdz culpando al “Carmonismo” de haber abandonado a Aranda. La respuesta no se hizo esperar, y Aranda fue clarísimo afirmando que se trabajó en conjunto, y que hay sectores del periodismo que están jugando a dividir a los peronistas.
Ahora bien, los sancarlinos tenemos a Difonso, que desde hace años ha contribuido a mantener la desunión dentro del peronismo. También la del radicalismo, pero ahora eso no nos interesa.
¿Qué hacemos nosotros para vencer a Difonso? ¿Qué hemos hecho para construir una alternativa de Gobierno real, creíble, seria, ordenada, respetuosa, responsable? ¿Cómo es el trato entre compañeros de distintos espacios? ¿Qué hemos hecho por los compañeros que necesitaban una mano? ¿Qué instancias hemos creado para discutir diferencias y profundizar coincidencias? ¿No hemos confundido al diferente con el enemigo?
Los cuatro sectores internos que participamos de las PASO del 22 de febrero, pasadas las elecciones nos pusimos a disposición de quien ganó. El proceso de organización o construcción de la unidad resulto muy dificultoso, porque carecíamos de experiencias de unidad, porque no supimos integrar los intereses (en el mejor sentido de la palabra) y necesidades de los sectores, porque no logramos el funcionamiento aceitado, etc. Pero la voluntad política estuvo. Al final, primaron las mezquindades, y cada uno atendió su juego, como en el andón pirulero.
Pero si nos quedamos en esas diferencias, vamos a haber retrocedido, y esta experiencia de disputa democrática interna, las PASO, no nos han servido.
Como dirigente de un nuevo peronismo, como parte de los responsables de lo que se hizo y de lo que no, escribo esta carta con la intención de que los/as peronistas reflexionemos, y hagamos el proceso maduro de entender que las diferencias internas no han sido significativas en cantidad de votos, sino que hemos perdido las elecciones porque más de la mitad de los sancarlinos eligió a Difonso, y nosotros tenemos la obligación de comenzar a superar los errores cometidos, y continuar y profundizar las acciones articuladas entre los distintos sectores, porque somos diferentes, pero no enemigos.
Los que nos sentimos parte del movimiento nacional y popular, del peronismo y del justicialismo, más allá del partido o del sector con el que simpaticemos, estamos en la obligación de trabajar para presentar a los mendocinos el proyecto para la provincia, y los que vivimos en San Carlos, deberemos superar las diferencias y trabajar para que en el 2019 la propuesta más elegida por el pueblo sea la nuestra.
Mientras nosotros nos quedamos en la discusión chiquita de las diferencias internas, Difonso se ríe a carcajadas en nuestra cara. Si lo mismo pasa en lo provincial, todos los conservadores se reirán en nuestra cara, y todos esos derechos conquistados en estos años de Estado presente, deberán ser defendidos en la calle, para que no vuelva ese Estado que abandona a su pueblo y lo deja en manos del mercado, que son un grupito de empresarios ambiciosos y enemigos de la patria.
Perón decía que “las doctrinas no son eternas sino en sus grandes principios, pero es necesario ir adaptándolas a los tiempos, al progreso y a las necesidades”. Los peronistas debemos volver a pensar en las banderas que nos unen, en la grandeza que Perón nos pedía, en el sacrificio con el que Evita luchaba, en la claridad de Néstor y Cristina para marcarnos quienes son los enemigos (del pueblo, y por lo tanto, enemigos del peronismo) para diferenciarlos de quienes son diferentes.
Mi pedido es a los/as dirigentes y a cada uno de los/as militantes del peronismo sancarlino, y se hace extensivo a la provincia también. Prioricemos las coincidencias, hagamos los esfuerzos, separemos las rencillas personales… TODOS UNIDOS TRIUNFAREMOS… Para que reine en el pueblo, el amor y la igualdad!!!!!!