Así lo solicitó la querella de la familia de empresaria Norma Carleti, asesinada en marzo en Tunuyán, luego de que declarara la mujer de unos de los reos que grabó el audio en el que confiesa uno de los acusados. Ambos debieron ser trasladados a La Pampa porque su vida estaba en peligro.
La querella de la familia de la empresaria Norma Carleti, a cargo de Federico y Victor Ábalos, solicitó al Ministerio Público Fiscal que se eleve una compulsa para investigar al ex senador Leonardo Hisa, acusado de ser autor intelectual del crimen de su ex esposa, por las amenazas y agresiones que recibieron dos presos que grabaron el audio de la confesión de Kevin Guerrero, el joven imputado como autor material del hecho de sangre ocurrido en marzo en Tunuyán.
Se trata de los internos Carlos Alexis Albornoz Bracamonte, alias Carloncho, y Manuel Cepeda, apodado Tijera o Bebé, quienes fueron condenados a diez años de prisión en el 2016 por el secuestro del hijo de una conocida narco lasherina, la Belén.
Ambos compartían la celda con el joven acusado de matar de más de 50 puñaladas a la titular de una importante firma frutihortícola del Valle de Uco.
En la grabación, que dura más de 50 minutos, Guerrero revela detalles de cómo fue planificado el crimen y quiénes intervinieron. Lo que provocó las detenciones de su padre, Juan Carlos Guerrero, que habría sido el vínculo entre él e Hisa, y de su madrastra, Susana Hurtado. Además, se complica a sí mismo con la frase “yo la maté”, admitiendo la autoría del ataque fatal.
Fuentes indicaron que Albornoz y Cepeda decidieron grabar a Guerrero debido a que contaba que había matado a Carleti como “si fuera un chiste y querían ayudar a la causa”. Sin embargo, luego aseguraron que no esperaban ser agredidos y amenazados por sus compañeros carcelarios.
Las primeras intimidaciones y ataques contra el Carloncho y el Tijera comenzaron en el mismo complejo en el que grabaron el audio: Boulogne Sur Mer, lugar en el que también está alojado Leonardo Hisa.
En setiembre pasaron algunos días en el penal de Almafuerte, pero, la situación fue la misma, por lo que debieron ser trasladados al Centro de Detención Federal U-32. Finalmente, terminaron llevándolos a Unidad 4 de la Ciudad de La Pampa, donde están aislados y bajo custodia, ya que su vida sigue corriendo peligro, detallaron las fuentes consultadas.
La querella de los Carleti ya había solicitado que Albornoz y Cepeda amplíen su declaración en la causa, para que hablen puntualmente de los reiterados ataques y amenazas que sufrieron en los complejos penitenciarios de la provincia. Se espera que esto suceda en las próximas semanas.
En tanto, quien tuvo la oportunidad de testificar ayer fue la pareja de Carloncho, que fue citada como testigo de los hechos que viene padeciendo el preso.
Al parecer, los dichos de la mujer complicaron a Leonardo Hisa, razón por la cual se pidió al fiscal Jorge Quiroga que eleve una compulsa para que el ex dirigente radical sea investigado como instigador al homicidio de Albornoz y Cepeda. Se espera que, en los próximos días, el Ministerio Público se expida sobre la solicitud.
El caso
El asesinato de Carleti ocurrió la madrugada del lunes 5 de marzo en su casa de calles República de Siria y Almirante Brown, en Tunuyán. Según la investigación, al menos, tres sujetos se metieron a la casa y atacaron a la mujer. Uno de los agresores tomó un arma blanca y la apuñaló alrededor de 50 veces en diferentes partes del cuerpo.
La hipótesis más fuerte sostiene que Leonardo Hisa, quien estaba en proceso de divorcio con Carleti, la mandó a matar y, para consumar el objetivo, le pagó a la familia Guerrero, cuyo padre trabajaba para él. Debido a esto, están detenidos el ex marido de la víctima y los hermanos Kevin, Alexis y Ever Guerrero, a los que se le sumaron luego su padre, Juan Carlos, y su madrastra.
Fuente: El Sol