El Ministerio de Salud comunicó que los medicamentos de venta libre deberán contener en forma detallada toda la información tendiente a facilitar la comprensión del usuario. Las especialidades medicinales de “Venta libre”, según lo definido por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), son aquellos medicamentos destinados a aliviar dolencias que no exigen en la práctica una intervención médica y cuyo uso, “en la forma, condiciones y dosis previstas no entraña, por su amplio margen de seguridad, peligros para el consumidor”.
La medida que establece nuevas “Definiciones y Lineamientos Generales de la Información que deberán contener los prospectos/etiquetas/rótulos de especialidades medicinales de venta libre”, postula entre otras pautas, que los datos deberán estar escritos en español; detallar en forma precisa el modo de acceder y usar correctamente el medicamento; inducir al usuario a consultar al médico ante cualquier duda que genere el remedio; consignar nombre comercial o marca, nombre genérico, forma farmacéutica, lugar de elaboración y condición de venta.
La norma establece además que los prospectos deberán estar escritos en tipografía Arial 8 o mayor, al tiempo que tendrán que incluir “pictogramas, íconos, colores diferentes y todos aquellos elementos de diseño que ayuden a un mejor entendimiento de la información”.
Asimismo a partir de la entrada en vigencia de la disposición, “los registros nuevos, las Modificaciones al Registro (REM) de prospectos/rótulos/etiquetas de productos de venta libre que se presenten para su aprobación o, aquéllos a los que se les otorgue el cambio a condición de venta libre, deberán ajustarse al tiempo que consigna que “para las especialidades medicinales actualmente comercializadas, el laboratorio titular del registro tendrá un plazo de dos años para la adecuación a la presente normativa”.
La medida tiene por objeto hacer más comprensible la información contenida en los prospectos, por lo que establece expresiones como “calma el dolor”, en lugar de “analgésico”, entre otros ejemplos.