Según la última encuesta nacional de factores de riesgo, la enfermedad afecta a cuatro de cada diez argentinos.
Antiinflamatorios, corticoides, anabólicos, descongestivos nasales, anticonceptivos orales y antidepresivos pueden causar hipertensión arterial (HTA), una enfermedad que no suele presentar síntomas y según la última encuesta nacional de factores de riesgo de 2018 afecta a cuatro de cada diez argentinos, alertaron hoy especialistas.
También llamada «enfermedad silenciosa», la HTA suele no ser percibida por el paciente hasta que no presenta problemas cardíacos, cerebrovasculares, renales o arteriales, es decir, cuando el cuadro ya está avanzado y es muchas veces irreversible.
«La HTA es el principal problema crónico de salud en la Argentina. Si bien las enfermedades crónicas no transmisibles (Ecnt) producen el 60% de las muertes en el mundo, en nuestro país esa cifra asciende al 73,4%», advirtió Verónica Shoj, directora nacional de Promoción de la Salud y Ecnt de la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación, con motivo del día mundial de la afección, que se conmemora cada 17 de mayo.
Según datos de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), una de cada cuatro personas no sabe que padece HTA, mientras que la tasa de pacientes adecuadamente controlados es baja.
«La falta de control puede estar asociada a la falta de síntomas, que hace que muchos hipertensos desconozcan su condición, y también a la falta de adherencia a los tratamientos, que no solo consisten en mejoras en la alimentación y actividad física, sino que en la mayoría de los casos suelen requerir uno, dos y hasta tres medicamentos simultáneamente», explicó a Télam Irene Ennis, presidenta de la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial (SAHA).
Una de las maneras de mantener la presión controlada es a través de una alimentación reducida en sodio.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir entre 3 y 6 gramos de sal por día, pero «los argentinos consumimos más del doble», afirmó Juan Carlos Pereira Redondo, director del Consejo Argentino de Hipertensión Arterial de la SAC y jefe de la Unidad de HTA del Cemic.
«La mayor cantidad de sodio se incorpora a través de los alimentos procesados y las bebidas, información que debemos conocer para reducir el consumo y prevenir la HTA», agregó.
Por su parte el cardiólogo Carlos Reguera alertó que el diagnóstico de HTA en niños está aumentando en los últimos años.
Se estima que la HTA afecta a entre un 1 y 5% de niños y adolescentes en Europa y los Estados Unidos, y aparece con mayor frecuencia en chicos obesos.
«La Argentina tiene la segunda tasa más alta de sobrepeso en menores de 5 años de América Latina y el Caribe, con un 9,9%. En los últimos años, la prevalencia de tomas elevadas de presión arterial en menores fue en aumento, y eso se debe en gran parte a la obesidad, el sedentarismo y la mala alimentación», detalló a Télam Reguera, jefe del Área de Cardiología y Medicina Preventiva del Instituto de Neurociencias Buenos Aires (Ineba).
El médico aclaró que «un único registro elevado de presión arterial no significa ser hipertenso».
«Se requieren al menos tres registros elevados para establecer el diagnóstico, y es importante recordar que se deben usar manguitos apropiados para el tamaño del brazo del paciente, para minimizar errores al tomar la presión arterial», completó.
Fuente: Diario Los Andes/Télam