Tras un interrogatorio de seis horas que se prolongó desde la tarde del miércoles hasta la madrugada de hoy, el juez de la causa dictó la prisión preventiva a Mijaloliakos, a quien la Fiscalía acusó de dirigir una «organización criminal», dentro de la cual era considerado el «Führer» y sus órdenes eran «incuestionables».
Al igual que el resto de sus seguidores acusados, Mijaloliakos negó que hubiese creado una banda criminal, responsable, según la policía y el gobierno griego, de decenas de asesinatos, ataques y amenazas contra militantes de izquierda e inmigrantes, informó la agencia de noticias EFE.
Tras la decisión del juez, la policía se llevó al popular líder de la extrema derecha griega esposado, mientras gritaba: «¡Viva Grecia y viva Amanecer Dorado!».
Según las filtraciones a la prensa local, durante su declaración Mijaloliakos acusó a la Fiscalía de liderar una «persecución política» contra él y sus filas.
Horas después le tocó el turno a su número dos, quien también quedó bajo custodia hasta que termine el juicio.
Antes de entrar al tribunal, Pappas, el único de los acusados que se entregó a la policía de forma voluntaria, aprovechó el enjambre de cámaras de televisión y micrófonos que lo esperaban.
«Amanecer Dorado participará en las próximas elecciones, sea cual sea la fecha de su celebración», prometió el líder neonazi.
Según los últimos sondeos, la popularidad de la fuerza de extrema derecha siguió creciendo entre la sociedad griega después de las últimas elecciones, en las que por primera vez obtuvieron varios escaños en el Parlamento.
Actualmente se estima que Amanecer Dorado es la tercera fuerza política nacional.
El grupo surgió a finales de los años ochenta, pero creció en las márgenes del sistema político de Grecia, especialmente desde el comienzo de la profunda crisis económica que aún tiene sumido al país en la incertidumbre política, social y financiera total.
La agrupación fue acusada de varios ataques violentos, sobre todo contra inmigrantes, pero fue el asesinato de un rapero izquierdista, Pavlos Fyssas, el que desató la operación de la Justicia y la policía contra este sector de la ultraderecha.
El músico fue apuñalado el 18 de septiembre en El Pireo por un radical con lazos con Amanecer Dorado.
No obstante, frente al juez, Mijaloliakos rechazó hoy cualquier responsabilidad sobre ese asesinato.
«Condeno ese asesinato como condeno la violencia en general. No soy un nazi», sentenció el ex militar, a pesar de que en diversas ocasiones se manifestó públicamente como un admirador del dictador alemán Adolf Hitler.
A diferencia del día de ayer cuando el primer ministro Antonis Samaras se quejó de la decisión del máximo tribunal de Atenas de liberar a tres de los cuatro diputados que habían sido interrogados, hoy el premier se declaró «conforme» con la prolongación de la detención de los dos máximos jefes neonazis.
«Quien viole la ley debe responsabilizarse por ello», dijo ante la prensa.
Al mismo tiempo, la sede de Amanecer Dorado emitió un comunicado en el que calificó de «inconstitucional» e «injusta» las detenciones de sus máximos líderes, a los que, recordó el texto, los amparan sus fueros parlamentarios.
Para contrarrestar las acusaciones de persecución política, la policía griega informó que en los allanamientos a las casas de los acusados, se encontraron armas y municiones sin licencia, numerosa propaganda nazi y fascista, cuantiosas sumas de dinero en efectivo y hasta una lista con direcciones de inmigrantes en Atenas.
Fuente: Télam