En comunicación con El Cuco Digital, el doctor Adrián Frick, fiscal en la causa por la muerte de Norma Carleti, aseguró que sigue como fiscal, y que el rumor de su renuncia fue algo totalmente ajeno y lejano a sus intenciones.
Ayer, en horas del mediodía comenzó a correr el rumor en algunos medios de comunicación que el fiscal Adrián Frick había presentado su renuncia. Sin embargo, el magistrado confirmó a este medio que el rumor fue totalmente infundado y que sigue trabajando en el caso que ha conmocionado a la opinión pública: el asesinato de la empresaria tunuyanina Norma Carleti.
Consultado sobre los avances en la investigación, Frick aseguró que “se sigue trabajando mucho” para resolver los interrogantes. En relación a las hipótesis manejadas, y específicamente sobre la posibilidad de que se haya tratado de un robo, el fiscal aseguró que “no se descarta ninguna posibilidad”. La mujer fue ultimada en su vivienda y presentaba, por lo menos, 52 puñaladas en su cuerpo. Tras su muerte, son varias las hipótesis manejadas en la investigación, aunque desde el entorno familiar de Norma, se señala a su ex marido, como un posible sospechoso. Por su parte, Leonardo Hisa, ex esposo de Carleti, afirmó que cree que se trató de un robo “que salió mal”. Por el momento, hay cuatro detenidos imputados, tres de ellos, hijos de un ex empleado del matrimonio Hisa-Carleti.
El caso que conmueve a la opinión pública de Valle de Uco tiene muchos interrogantes abiertos, entre ellos, el accionar de la policía tras la llamada de los vecinos al 911. Pudo saberse que al lugar llegó primeramente un móvil con una sola efectivo policial (una situación irregular, ya que los patrullajes se realizan en pareja); la mujer policía trató de seguir a los delincuentes, pero los perdió en el recorrido. Otro interrogante, es el ensañamiento que mostraron los delincuentes al matar a la víctima, y también el hecho de que en una mesa de la vivienda se encontrara alrededor de 50 mil pesos y joyas, entre otros elementos de valor, que los delincuentes no tomaron.
Foto: cortesía Los Andes