La directora Adela Rossi convocó a profesionales de INTA para comprobar que el recurso sea totalmente apto.
La medida responde a que algunos empleados se habían quejado, de manera informal, sobre algunos problemas físicos que, según los denunciantes, podrían estar relacionados con la contaminación del agua.
La semana pasada, algunos representantes del sindicato ATE hicieron declaraciones en medios radiales denunciando que empleados del hospital se habían enfermado a causa de agua contaminada en el hospital.
La titular del centro regional, la licenciada Adela Rossi, explicó que “el agua del nosocomio no es de mala calidad”, pero que además “para tranquilidad de la comunidad, profesionales del INTA realizan estudios para comprobar la potabilidad del recurso”. Según la dirección del nosocomio, “el agua es una preocupación constante, porque es el recurso vital y principal para el desempeño correcto de nuestro trabajo”.
En relación a las denuncias vertidas en algunos medios por representantes de Ate, asegurando que algunos empleados del hospital se habían enfermado por el agua, Rossi explicó que la situación no fue presentada formalmente ante la dirección y que la información llegó a través de “distintas versiones orales”. Sin embargo, y más allá de la informalidad de las denuncias, la funcionaria explicó que “la situación fue informada al Ministerio de Salud, mientras se toman los recaudos correspondientes”.
Por otro lado, la funcionaria contó que desde hace unos días se trabaja con el municipio de Tunuyán, tramitando ante AYSAM otra boca de ingreso que amplía el caudal de agua que entra al hospital. También, desde Irrigación, Carlos Dávila acercó una propuesta elaborada con la comunidad para realizar una perforación que amplíe el suministro.