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El Manzano: Recursos dice que no hay autorización para construir en la Reserva

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Por Paula Hinojosa

Recursos Naturales afirma que no hay autorización para construir en la reserva del Manzano. Así lo confirmaron las autoridades del organismo provincial, en relación a la aprobación del estudio de impacto ambiental, que debería haber realizado la empresa privada que construye sobre la reserva Portillo-Piuquenes.

Comienza un nuevo desafío para el desarrollo turístico y productivo de las tierras del Manzano Histórico. Esta vez, será cuidar los recursos naturales de las generaciones venideras, apostando al desarrollo sostenible del espacio.

Fue un paso más que importante para todos los tunuyaninos, y para el Valle de Uco en general, que en el año 2012 se declarara como  Área Natural Protegida a 314.600 hectáreas de la región. La norma (ley 8400) declaró protegida a la región montañosa ubicada al sector Oeste de los departamentos de Tunuyán, Tupungato y San Carlos. Es decir, a toda la región que va desde el volcán Tupungato hasta la Laguna del Diamante, y tuvo como objetivo “conservar los recursos hídricos, flora, fauna, gea, paisaje y material arqueológico; preservar las fuentes de agua que irrigan el oasis productivo del Valle de Uco; potenciar los atractivos turísticos de su zona montañosa y preservar todo lo referente al patrimonio cultural existente”.

El Área Natural Protegida Manzano Portillo de Piuquenes fue categorizada como Reserva de Uso Múltiple y Reserva Recreativa Natural.

Sin embargo, desde su aprobación muy poco se hizo al respecto, y en el presente comienzan los reclamos de vecinos ambientalistas a partir de que el Estado provincial y los Estados Municipales no tuvieron una mayor determinación sobre el manejo y el cuidado de la Reserva. Lo que significó, que a partir de las disputas por la propiedad de las tierras que llevan adelante viejos herederos y empresarios foráneos, uno de ellos comenzara a ejecutar todo un megaemprendimeinto (una pista de ski) sobre la zona conocida comúnmente como Manantiales.

Ante esta situación, y a partir de fotos que circularon en donde se observa que este empresario construye sobre una planicie ubicada cerca del cajón de Arenales, comenzaron los reclamos de medioambientalistas de Tunuyán. El principal reclamo radicó que el privado construye sin la autorización de la dirección de medioambiente del gobierno provincial.

Efectivamente, se pudo confirmar que el mega emprendimiento que se pretende desarrollar no cuenta con un estudio de impacto ambiental, y por lo tanto tampoco con la autorización para hacerlo. De acuerdo a lo explicó la directora provincial de Recursos Naturales, la ingeniera Mabel Chambouleyron, el emprendimiento “no tiene autorización”.

“Esta es una experiencia única e importante, ya que la Reserva se ha ejecutado sobre terrenos privados, y dada la importancia de proteger las cuencas hídricas y los recursos naturales allí presentes, se ha creado sin el total acuerdo de los propietarios. Esto implica una limitación al dominio, y por lo tanto es obligatorio que cualquier proyecto que se ejecute sobre la Reserva tenga un estudio de impacto ambiental, posteriormente se realice una audiencia pública, y finalmente desde medioambiente procederemos a dar una declaratoria. Esto es obligatorio”, sentenció la funcionaria provincial. A lo que agregó que hace unos días atrás, el propietario del proyecto de la pista de ski sobre la zona de  presentó en el área de medioambiente e ingresó un pedido para comenzar a abordar lo ambiental de su proyecto, cuestión que “en este momento está siendo evaluado por el área técnica de la dirección”.

Al respecto, es de destacar la realización de la audiencia pública, donde los vecinos puedan manifestar su opinión sobre el proyecto de la pista de ski. Aunque ésta no es vinculante, servirá para la declaratoria final que emitan desde la dirección de medioambiente de la provincia, autorizando o no la obra.

Otro dato a tener en cuenta, es que al parecer el grueso de la obra se realizará sobre dos glaciares, una situación que debe ser evaluada desde otro enfoque a efectos de cuidar las reservas de agua. Ante este dato, la directora de recursos naturales explicó que también se le dará intervención al Instituto Argentino de Nivología y Glaciología (IANIGLA).

En definitiva, y tal como manifestó la funcionaria provincial, el privado tuvo que detener la obra ya que puede dañar vegas de agua y humedales, cuestión que es irrecuperable ya que nuestros ríos y arroyos surgen de estas vegas. “El propietario quiere avanzar a pasos agigantados, y debe esperar a que los organismos competentes den su opinión, y valoren el impacto con un plan de contingencias a ejecutar. Es una pena que comiencen a invertir no teniendo estos pasos” sintetizó Mabel Chambouleyron, agregando que “como sociedad madura debemos llegar a un entendimiento entre el estado y el propietario, comprendiendo que matar la naturaleza, la gallina de los huevos de oro, no es estratégico. Y como sociedad madura debemos pensar el futuro”.

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