La denuncia la realizaron los apoderados locales del Frente para la Victoria. Según los referentes, la edila de la UCR, María del Carmen Martín se llevó la documentación electoral complicando el escrutinio. Por su parte, la referente radical niega la acusación.
Apoderados del Frente para la Victoria (PJ) denunciaron a una concejala de la UCR de Tunuyán ante la Justicia Electoral Nacional. La acusan de haber sustraído el padrón general de una mesa en momentos en que se desempeñaba como fiscal general de su partido. Piden además la nulidad de la mesa 2940 en el colegio Normal Toribio de Luzuriaga. “No tengo nada que ver con ese tema”, retrucó la denunciada.
La presentación del PJ fue realizada el martes ante la Secretaría Electoral distrito Mendoza y lleva la firma de los apoderados del Frente para la Victoria: Miriam Gallardo y Alejandro Jardon. Los denunciantes señalan que existió un delito electoral, encuadrado en el artículo 139 inciso (h) del Código Nacional Electoral, que pena a quien “ocultare una lista de sufragios o por cualquier medio hiciere defectuoso el escrutinio de una elección”.
El domingo 23, la concejala María del Carmen Martín ofició de fiscal general de la UCR en la mesa 2940 del circuito 91. Según la denuncia, “sustrajo el padrón de dicha mesa a pocas horas de finalizar el comicio, lo que hizo defectuoso el escrutinio”.
El presidente de mesa labró un acta que llevó la firma de las autoridades y de los fiscales partidarios. El acta se adjuntó a la documentación de la urna para dejar constancia de los hechos denunciados. Al ser consultada sobre el padrón, “María del Carmen Martín respondió que no lo tiene”. Más tarde, “alegó que se lo llevó y no sabe dónde lo dejó, reconociendo de este modo que ella lo portó”, dijeron los denunciantes.
“La gravedad del hecho denunciado queda de resalto dado que al momento del hecho se había desarrollado la mayoría del comicio. A pocas horas de finalizar, las autoridades de mesa se vieron imposibilitadas de tener la documentación del control de los votantes, vaciando el funcionamiento de la mesa, teniendo que utilizar el padrón del presidente de mesa suplente y realizando un obligado control con las copias del padrón de los fiscales partidarios para así tratar de saber quiénes habían votado”, apuntaron los apoderados.
Por su parte, la acusada desmintió todo: “No tengo nada que ver con todo esto”, dijo a UNO.
“El domingo me senté a esa mesa –relató– para remplazar por unos minutos a nuestra fiscal. Cuando ella regresó me fui y en ese momento me dijeron que me había llevado el padrón. Estoy en la función pública y no me voy a ensuciar las manos por un padrón. Para mí es una anécdota, en la que nada tuve que ver”.
(Fuente: Diario Uno/ Julio Luzuriaga)