Sería de $5.000. El Gobierno ya había anunciado un extra del mismo monto para estatales.
El Gobierno confirmó el pago de un bono salarial obligatorio para los trabajadores del sector privado que será cercano a los $5.000.
Tributaristas adelantaron que el beneficio pagará el Impuesto a las Ganancias.
El impacto en el bono, dependerá en qué tramo de la escala de Ganancias se encuentre cada trabajador.
Este plus salarial, que se otorgaría vía decreto presidencial, tiene por objeto paliar parcialmente los efectos de la fuerte devaluación producida tras las PASO de agosto.
«Empezamos a conversar la posibilidad de establecer algún tipo de compensación para los privados como se hizo para la administración estatal», señaló el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica.
Además, señaló que, para definir esa «compensación», en el Gobierno «queremos mirar el índice de inflación del jueves, volver a sentarnos para evaluar la mejor metodología, pero tomamos como referencia el bono que se le dio a los estatales, de $5.000 . Trabajamos sobre eso‘.
El ministro admitió que «el salto inflacionario que estamos sufriendo producto de la devaluación después de las PASO, está generando bastante inquietud por la pérdida de salario real».
Pero aclaró: «hay que evaluar muy bien el impacto de este tipo de bono en las pequeñas empresas, porque no solo hay un impacto inflacionario, sino que en muchas de ellas se secó la plaza en términos de financiamiento de corto plazo. Y el bono puede generar un perjuicio».
Los estatales percibieron un bono de $5.000 a través de un decreto de necesidad y urgencia, y la misma modalidad utilizaría la Casa Rosada para beneficiar a los privados, posiblemente a partir del mes que viene.
El Poder Ejecutivo podría autorizar a pagar este plus salarial -que será obligatorio- en uno o varios tramos, según las posibilidades de las empresas, sobre todo de las pequeñas y medianas.
Fuente: iProfesional