Se trata de Juan Carlos Fabrega y Patricia Fadel. El primero fue presidente del Banco Nación y la actual senadora formó parte del directorio de la entidad que otorgaba giros en descubierto a las empresas constructoras del empresario.
Juan Carlos Fábrega, ex director del Banco Nación, tendrá que declarar en la causa de lavado de dinero, según lo dispuso el juez Daniel Rafecas, bajo la sospecha de haber beneficiado las empresas del Lázaro Báez. No es el único mendocino citado a indagatoria: también aparece la actual senadora provincial del PJ, Patricia Fadel, que formó parte del directorio de la entidad bancaria.
Hay nueve ex funcionarios del BN citados por Rafaecas, además de los mendocinos mencionados, a partir del pedido del fiscal Carlos Stornelli. La sospecha del fiscal es que el modo en el que el Banco Nación financiaba a las empresas de Báez para realizar la obra pública vial constituye un delito.
Los otros funcionarios son Ignacio Forlón -amigo de Máximo Kirchner y ex presidente de la institución-; Marcelo Gustavo Mazu -gerente de la sucursal Río Gallegos-; Ángel Rogelio Cabral -gerente zonal de la sucursal Comodoro Rivadavia-; Enrique Osvaldo Arceo -presidente y director de Nación Fideicomisos-; Esteban Acerbo; Cecilia Fernández Bugna y Silvia Ester Gallego, también ex integrantes del directorio del BNA.
Para Stornelli, primero se facilitaba el giro en descubierto de las empresas de Báez, para luego pasar a la confirmación de un fideicomiso dedicado a financiar a las firmas Austral Construcciones y Kank y Costilla.
El fiscal consideró que había un plan para auxiliar financieramente a las empresas de Báez para la realización de la obra pública, a través de la sucursal de Comodoro Rivadavia del Banco Nación, donde se otorgaban sumas millonarias a Austral y Kank y Costilla.
«Toda la maniobra –había dicho el fiscal- comenzaba en la sucursal Río Gallegos donde las firmas tenían cuenta bancaria, luego pasaban a la zonal de Comodoro Rivadavia, ya que por la envergadura del préstamo se requerían, por normativa de la entidad bancaria, que la aprobación de lo solicitado se hiciera en una sucursal que abarcara mayor responsabilidad; y si nuevamente superaba los topes estipulados en la normativa, el trámite de solicitud subía hasta el directorio del Banco de la Nación Argentina».
Fuente: Infobae