Aseguró que tiene amigos homosexuales pero que no los deja besarse ni abrazarse delante de sus hijos.
Dos estudiantes fueron obligadas a separarse porque desde la escuela consideró que lo que hacían era “sexual” y que no podía hacerse en el establecimiento. Ante la orden del directivo, sus compañeros organizaron una sentada y la autoridad fue obligada a pedir disculpas.
El hecho ocurrió en la escuela Manuel Dorrego, de Morón, Buenos Aires, donde durante los recreos dos adolescentes, que están de novia, fueron obligadas a separarse por el director y una de las preceptoras.
“Nos dijo que estaba mal porque era un acto sexual y nos dijo que él tenía amigos homosexuales, pero que no dejaba que se besaran delante de sus hijos”, relató Camila, una de las estudiantes obligadas a separarse.
A pesar de que ellas le contestaron que solamente querían permanecer tomadas de la mano, el director le respondió que él era la autoridad y por eso debían acatar su orden.
Según contó al portal SN Online, Camila le planteó al director que estaba cansada de no poder estar junto a su pareja, cuando compañeras de ellas podían estar tomadas de la mano de sus novios sin que nadie les dijera nada.
Repudiando el accionar de la escuela, el viernes pasado los estudiantes del Manuel Dorrego hicieron una sentada masiva y obligaron al directivo a que pidiera disculpas.
“Negaba y al mismo tiempo se disculpaba, cosa que no tiene mucho sentido”, afirmó la alumna.
Los estudiantes se organizaron en asambleas por turno, donde discutieron y rechazaron estas expresiones y discutieron medidas de acción a seguir para que no vuelvan a escribirse capítulos de discriminación como éste en el seno de la escuela.
Fuente: elnueve.com