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Diez preguntas a un poeta del Valle de Uco: Tomás Fadel

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Fadel_Hinojosa
Foto: www.poesiaargentina.com

Poeta, traductor y editor, nació en el departamento de Tunuyán. Codirige desde el 2010 la editorial artesanal Chapita junto a Daniel Durand y Matías Heer. Tradujo el libro Viñas desmoronadas de Su Tung Po y es parte del staff permanente de Embalse, Gimnasio de Poesía, en la ciudad de Buenos Aires. Conocé al artista valletano en una entrevista publicada en el portal «1 poeta y 10 preguntas”.

1-¿Cuál fue tu primer contacto con la poesía?

Fueron varios, porque ahora se amontonan como contemporáneos, pero obviamente no lo fueron. Mi tía Pichona era dueña de un libro que mi madre le robó: era un libro naranja, muy lindo, súper robusto, con ilustraciones y algunos versos, como el del niño que tenía una cara muy fea porque se quedaba en la cama cuando se le iba el sueño. Era algo así: Fea es la cara/del rinoceronte/fea es la cara/del camello también/pero mucho más fea/es la cara de un niño/que se queda en la cama/cuando se le fue el sueño. A los 12 fue el otro gran boom: mi hermano me regaló un libro de Salinger, que yo leí en dos días, como si fueran dos poemas; y un amigo de mi pueblo, Marquitos Pérez, en ese entonces un loco recuperado, me fue a buscar a mi casa, casi sin conocerme por entonces, para llevarme arrastrando a un taller de escritura que funcionaba en su garage y me mostró unos dibujos de otro loco, que por entonces todavía no se recuperaba,  Julián Cruz: eran unos bocetos extrañísimos de la era del comienzo de internet (al menos en Tunuyán, en esa época, comenzaba internet), eran lo que hoy se llamaría poesía visual, pero nunca más supe de esos bocetos ni los volví a ver. Creo que ese fue el primer poema que vi en mi vida. Ahí empecé a leer.

 2-¿Quiénes fueron tus poetas formativos?

Bueno, la pregunta es tramposa, uno todo el tiempo va agrandando el combo que podríamos llamar «poetas formativos». Principalmente diría que Daniel Durand, pero gracias a él, también, él mismo quedó como un punto en una serie de nombres como lo podrían ser Raimondi, Juanele, Zelarayán, Leónidas (de la selección local) o Pound, Tisi Eliot, Zukofsky, Ashbery (de la selección de habla inglesa)

 3-¿Pensás que la prosa es más fría que la poesía?

No necesariamente. Tiendo a pensar que la prosa puede ubicarse en el registro de la poesía si utiliza sus herramientas. Si hablamos de la novela, bueno, no diría que es más fría, pero sí es otro registro de la realidad, que apunta a otras cosas, que algunos podrían llamar «más frías».  Creo que el bichi Borges decía algo así como que la diferencia entre prosa y poesía radica más bien en las expectativas que el lector tiene hacia ellas.

4- Hablando de la génesis.  Qué me puedes decir de tu propia poética?
Un integral: el límite de abajo, el habla; el límite de arriba, la música.

 

5-”La mentalidad del “mercado” de la poesía no tiene un peso inherente. Sirve para algo la poesía?

No entiendo bien la pregunta, en todo caso, cuando me hago una pregunta parecida, leo Función de la poesía y función de la crítica, de Eliot.

 6- ¿Desarticular la gramática funciona cuando el lenguaje carece de identidad?

La única identidad del lenguaje es la de sí mismo, y la de una única lengua, la de sí misma. No creo que un poeta pueda darle al español una identidad nueva, más que la que tiene. La gramática es la del lenguaje articulado, la doble articulación del lenguaje humano es lo que lo diferencia de otros lenguajes animales. La gramática. Supongo que más que desarticularla debe reconfigurarse

 7- ¿Cuál fue el último libro de poesía que leíste?

Yo3, de Matías Heer

8 – ¿Qué pasa con la complejidad de la poesía?

Me kb

 9- ¿Cuál es la mejor forma de terminar un poema?

Cuando aparece el final, se termina. Si quedó algo colgado en la sintaxis mental que no se escribió, generalmente puede agregarse por el medio, o aprovechar para desestimarlo.

10- Unicidad / multiplicidad lírica. ¿Hay muchas poesías, o una sola?

Muchas, desde úh hasta aplausos.