Especialistas, académicos y dirigentes políticos destacaron el lanzamiento realizado el miércoles del Arsat-2 -el segundo satélite geoestacionario fabricado en el país por la empresa rionegrina Invap- como un hito en la política de desarrollo espacial que reafirma la capacidad tecnológica de la Argentina.
Especialistas, académicos y dirigentes políticos destacaron el lanzamiento realizado el miércoles del Arsat-2 -el segundo satélite geoestacionario fabricado en el país por la empresa rionegrina Invap- como un hito en la política de desarrollo espacial que reafirma la capacidad tecnológica de la Argentina.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, calificó como “hecho histórico” y “un logro de todos los argentinos” el lanzamiento del satélite, y consideró que «es superlativo” que científicos del país hayan construido el aparato, “algo impensado hace pocos años atrás».
«Recuerdo muy bien que fue Néstor Kirchner quien comenzó a tomar las decisiones trascendentales en materia de política espacial y entre ellas la de cortar en forma definitiva la concesión otorgada por parte del Estado argentino a una empresa privada y que no era otra cosa que tener el espectro privatizado», recordó el ministro coordinador en su habitual encuentro con la prensa en Casa de Gobierno.
«Es un momento que nos produce una gran satisfacción: es un pedacito de Patria que se va al cielo para abrir nuevas posibilidades para el desarrollo, para la ciencia, la tecnología, las posibilidades más amplias, posibilidades comerciales y de investigación que son altamente positivas», subrayó el candidato a gobernador de Buenos Aires.
Por su parte, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, coincidió en que el lanzamiento del Arsat-2 «para el país es un hecho de trascendencia que surge a partir de una mirada política y de una concepción de lo que significa el Estado».
Rossi destacó que para la construcción de los satélites geoestacionarios se invirtieron «200 millones de dólares durante todo este tiempo y además involucró a más de 100 empresas que junto con Invap participaron de la construcción de los Arsat 1 y 2».
El funcionario consideró que además de que decisiones como esta «impulsan el desarrollo industrial de la Argentina», se trata de «un hecho de soberanía tecnológica, porque la soberanía ya no es hoy solamente defender la territorialidad del país, sino que soberanía es generar situaciones y hechos que produzcan que nuestros gobernantes tengan los mayores grados de libertad a la hora de tomar decisiones».
Tras afirmar que «sin duda que la única manera de acortar la brecha con los países centrales es tener desarrollos científicos y tecnológicos propios», explicó que junto con Invap Defensa lleva adelante la fabricación de radares y el diseño de aviones no tripulados.
A su turno, el gerente General de Invap, Héctor Otheguy, sostuvo que «esta es una de las pocas ocasiones en las que los científicos y técnicos podemos dar una alegría masiva similar a lo que es un partido importante de la selección o un titulo: es un satélite y lo hicimos los argentinos».
Otheguy aseguró que «el lanzamiento del satélite es una de las ocasiones en las que uno, haya participado o no, se emociona», y subrayó: «Allí tenemos todos la misma camiseta».
Desde la oposición, la diputada nacional Graciela Villata, del Frente Cívico de Córdoba, celebró el anuncio del envío de un proyecto de ley de Desarrollo de la Industria Satelital Argentina por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y sostuvo que se trata de “apoyar a una política a largo plazo”.
“La ley establece una política a largo plazo, políticas de Estado que en todo momento reclamamos. Tenemos que cambiar políticas de gobierno por políticas de Estado, que nos van a permitir desarrollarnos no sólo en ciencia y tecnología sino en todos los aspectos de nuestra democracia”, sostuvo Villata.
El proyecto de ley ingresó este mediodía al Senado, donde se prevé que el próximo martes comience a ser debatido en comisiones.
La celebración por el exitoso lanzamiento llegó también a la Legislatura porteña, que en la sesión de hoy aprobó un proyecto de declaración en el que se afirma que el lanzamiento de ayer «constituye otro contundente ejemplo de las acciones encaradas por el gobierno nacional al establecer claras y precisas políticas de Estado».
«Fue durante el gobierno de Néstor Kirchner cuando se tomaron las decisiones políticas para que la Argentina comience a diseñar sus propios satélites geoestacionarios, logrando con éxito el lanzamiento el año pasado del Arsat 1», indican los fundamentos de la iniciativa, que resalta que la fabricación de los satélites en la planta barilochense de Invap «permite afianzarnos en el desarrollo de la tecnología espacial y nos convierte en el primer país de Latinoamérica en desarrollar una industria espacial propia».
El decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata, Marcos Actis, coincidió en que el lanzamiento del satélite Arsat-2 que se concretó ayer “reafirma la capacidad tecnológica de Argentina para hacer satélites geoestacionarios» y, al igual que Rossi, evaluó que la puesta en órbita “implica soberanía».
Fuente: télam