Al igual que hace 5 años en una Cumbre del Mercosur, hoy volvieron a desalojar a 31 personas que viven en un galpón en las inmediaciones del Mendoza Plaza Shopping.
Desde Guaymallén aseguraron que la medida no está relacionada con el encuentro de presidentes sino que se debe a una denuncia del propietario del espacio.
“Tuvimos la mala suerte que nos coincidió con la Cumbre. Es un trabajo que venimos realizando desde que estoy en la Dirección. Estas familias están aquí desde hace tiempo, algunos son más recientes pero estamos hablando que en el 2012 ya fueron desalojados. Lo que pasa es que no se hizo un trabajo integral y volvieron otra vez al mismo lugar. Nosotros lo veníamos trabajando pero los procesos judiciales son complicados y largos”, explicó la directora de Desarrollo Social de Guaymallén, Silvia Donatti, en diálogo con radio Nihuil.
“Una de las familias es una adjudicataria de una vivienda en Guaymallén y en dos meses se le entregará. Le vamos a pagar el subsidio del alquiler hasta que tenga su propia casa”, agregó.
Además, la funcionaria municipal dijo que no fue un desalojo violento porque todas las personas fueron reubicadas.
“Logramos que ninguna fuera a un albergue. Unas tienen redes familiares, a otra le conseguimos una vivienda para un chico que está en silla de ruedas con su mamá y tres hermanos más. Otros fueron trasladados a Corralitos, otra familia con cinco chicos aceptó un lote que se le dará con escritura y se le va a pagar un subsidio de alquiler hasta que puedan construir un salón. Nosotros le vamos a dar la parte del techo y desde provincia se le va a buscar un subsidio para la compra de materiales. Sería una solución definitiva”, indicó Donatti.
Algunas de las familias viven desde hace más de diez años en el inmueble sobre calle Gagliardi a metros del bulevar Pérez Cuesta y al igual que en 2012 los desalojaron antes de la Cumbre del Mercosur. En el lugar hay 16 niños que ya están bajo la órbita de la OAL.
“Coincidió que cuando en el 2012 vinieron los presidentes los trasladaron y después volvieron a ese lugar. Nos ha coincidido de que estaban los presidentes pero podríamos haber esperado que pasara, lo que pasa es que la orden salió ahora porque el particular hizo otras vez la denuncia”.
La edificación quedó a medio terminar hace años porque el dueño murió y había problemas de sucesión pero ahora el drama judicial se destrabó y los herederos reactivaron la denuncia de desalojo.
“No fue un desalojo inminente porque estábamos trabajando con ellos, es más ya lo habíamos llevado nosotros mismos a provincia para tramitar este subsidio, el cual ya lo están cobrando hoy. Una sola persona fue detenida, que tenía antecedentes, con los demás fue todo pacífico”, dijo Donatti.
“Les dimos colchones y frazadas nuevas. Lo que sí le exigimos al privado que inmediatamente empezara a hacer el cierre o la demolición para que no ingresaran”, culminó.
Fuente: Diario Los Andes