Será para rehabilitación, internación y cirugías. Demandará una inversión de 144 millones de pesos y estará ubicado en Las Heras. Comenzarán a construirlo antes de fin de este año y planifican terminarlo para 2015. El más importante del oeste argentino.
La referencia a nivel nacional obligada era, hasta ahora, el Sanatorio Fleni, de Capital Federal, que funciona hace más de 50 años y fue pionero de la tomografía computada.
Pero los responsables del proyecto que apunta a que Mendoza tenga el centro de rehabilitación para casos de traumas neurológicos y cirugías de alta complejidad más importante del Oeste argentino, ya se animan a postularlo como un complejo que lo superará.
El proyecto, a partir de una inversión estimada en unos $144 millones, estará ubicado en Las Heras y prevé disponer de 120 camas para tratamientos de avanzada.
El primer Centro Regional de Politraumas y Recuperación de Alta Complejidad es una iniciativa de la Fundación San Andrés, una referencia regional en la materia. Y podría complementarse, cuando esté listo -su plazo de ejecución es de 24 meses- con el helipuerto policial cercano, para recepcionar casos urgentes que lleguen desde distintos puntos de la provincia o de regiones cercanas.
Con la Evaluación de Impacto Ambiental aprobada por el municipio de Las Heras, el emprendimiento ubicado en la manzana 17 del barrio Infanta transita su primer mes con el movimiento de suelos, dentro de una superficie total de 13.000 m2.
La aspiración del médico especialista Eduardo Bufagni, cabeza de la Fundación desde su apertura en 1995, es que se convierta en polo receptor regional y también internacional. De hecho, la entidad firmó un convenio con el Gobierno de San Luis para la derivación de casos complejos y avanza en replicar el mismo modelo con la provincia de San Juan.
La Agencia de Atracción de Inversiones de la Municipalidad de Las Heras propició la locación del emprendimiento mediante la modalidad de “donación con cargo” del terreno. Esto implica, de acuerdo al responsable comunal, Carlos Corengia, que “el inversor se compromete a desarrollar una inversión que contemple el valor del mismo; en este caso, de una magnitud importantísima”.
El nicho o segmento que atiende la institución va desde la problemática de los ACV (Accidentes Cerebro Vasculares) hasta las lesiones traumáticas más graves. En una estadística “caprichosa”, según lo explica el gerente general Daniel Robles, “a la accidentología vial, y a la derivada de las situaciones de inseguridad, le siguen los casos de ACV y de discapacidades”.
Fuente: Diario Los Andes