Ministros y funcionarios del área de agricultura de los países integrantes del Grupo de los 20 se reunirán en Buenos Aires, a partir de hoy y por dos días, para analizar la suba en el precio de los alimentos y la volatilidad existente en los mercados internacionales de materias primas. Mientras la Unión Europea, con Francia a la cabeza, alienta la imposición de precios máximos al trigo y demás productos de primera necesidad, desde los países productores resisten esa postura.
La propuesta del gobierno de Francia resultó el punto de partida del debate en torno de qué debería hacer el G-20 con el aumento de los alimentos. Las revueltas en el norte de Africa, originalmente en respuesta al hambre que amenazaba producir el encarecimiento de las materias primas, alertó principalmente a las potencias europeas sobre la necesidad de encontrar una respuesta.
Sarkozy dio la suya, pero ésta no pareció contemplar que uno de los motores centrales del incremento y la volatilidad en los mercados agrícolas es la excesiva especulación financiera volcada sobre las operaciones de futuro. Y esta especulación surge y se desarrolla en los países centrales, que hasta ahora han fracasado en cualquier intento de controlarla
Fuente: Página 12