En 1977 la hija de Carlos Alonso desapareció en plena dictadura. Años después, el gran artista presentó su colección “Manos Anónimas”, una serie de 45 obras que habla sobre los horrores del proceso cívico militar.
«El dolor no terminó, pero después de 30 años, me apareció la pintura» dijo el maestro en la inauguración de la obra.
«Para la inauguración fui con mi familia», recuerda Alonso en charla telefónica con un diario nacional, desde Unquillo (el pueblo cordobés donde vive hace décadas). «Había una sala donde estaban colgada la serie ‘Manos…’ Cuando entré, quedé petrificado. Sentí que se me caía todo. Significó la cosa cumplida, el círculo que se cierra. Algo que había encontrado su destino.» «Desde ese momento», aclara, «ya no tengo más la mochila del mensaje, la obligación de dar testimonio de la tragedia personal y colectiva que vivimos. Durante treinta años sentí esa responsabilidad, que tuve que elaborar para seguir sobreviviendo». Alonso se refiere, por supuesto, a la dictadura, que lo tocó en la médula cuando su hija fue secuestrada y luego desaparecida, en 1977.
A continuación, algunas obras del artista.
Un comentario
Tristisima, la visitamos en el Palacio Ferreyra en ciudad de Cordoba, Carlos Alonso es el artista vivo mas importante de nuestro pais.. Esta muestra, estoy escribiendo una ponencia acerca del Humor y el arte, representa justamente lo que no es sencillo de representar, y que el artista fue gestando en años..Lo del humor como modo de hacer posible la dramaticidad que tanto se elude en las obras comediales, aunque sean de Alonso de gran calidad artistica.
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