El Ministerio de Hacienda presentó el mes pasado un informe sobre el estado actual de la deuda pública provincial. Martín Kerchner, Ministro de Hacienda, oficializó que la deuda pública de la provincia de Mendoza asciende a $23.183 millones, en lo que es un deuda de dimensiones históricas y representa un aumento de 8593 millones respecto a diciembre de 2015.
Lo más preocupante es que el alto nivel de endeudamiento responde al déficit provincial y la necesidad de recursos para pago de gastos corrientes, es decir que no estarán destinados en su mayoría a inversión o a la compra de bienes de capital.
Respecto a la moneda de la deuda, el 41,3% está en pesos argentinos y el 58,7% en dólares, lo que implica un aumento directo cada vez que se devalúa la moneda. Esto representó $1417 millones solo en el primer semestre de 2016.
La mayor parte del incremento se debe a la emisión del bono Mza2024 equivalente a 500 millones de dólares colocado en Nueva York, Londres y otros mercados autorizado en la ley de presupuesto. Los aproximados 7000 millones de pesos obtenidos por este bono son destinados al pago de amortización de deuda ubicado en $4622 millones, de los cuales ya se pagaron $1319 millones, y el resto al pago de parte del déficit del presupuesto 2016 que suma otros $5400 millones.
En relación a la deuda flotante que superaba los $5800 millones centralmente con proveedores y organismos descentralizados se pagaron $4105 millones. La deuda flotante es aquella que se toma dentro del mismo ejercicio para obligaciones a corto plazo. Esta deuda se pagó en efectivo a aquellos que poseían créditos inferiores al millón de pesos, y en “Bonos de Reestructuración de deuda” por $1000 millones y “Títulos de Restructuración de Deudas 2015“ por $998 millones, los cuales podrán ser vendidos por sus tenedores en el mercado de valores. Esta operación había sido autorizada en la famosa Ley de Transición acordada por Pérez y Cornejo en noviembre de 2015.
La deuda con el Banco Nación de $2200 millones, fue reprogramada para ser pagada en 5 periodos hasta 2021, y en el trienio siguiente deberá hacerse frente a gran parte de la deuda contraída estos meses.
A los endeudamientos autorizados en la ley de transición y la ley de presupuesto, aun resta saber si se hará uso de los créditos autorizados para construir una cárcel, que serian otros $1000 millones y otros $1200 millones en el acuerdo por la devolución de la coparticipación.
A pesar de esta situación, Cornejo está pidiendo que se le autorice un endeudamiento de $3.700 millones, para incluir en la pauta de gastos del año que viene. Los legisladores justicialistas se encaminan a oponerse a autorizar el endeudamiento, que se está discutiendo en las comisiones de la Cámara de Diputados.
Para los justicialistas, los financiamientos dados este año y los créditos tomados por el Poder Ejecutivo, más un aumento impositivo que calculan que será del 40 por ciento promedio y que ha sido calificado como «altísimo», debería alcanzarle al Gobierno para gestionar el año próximo.
Los 4.000 millones de déficit y el endeudamiento de 3.700 millones son el corazón del Presupuesto 2017 y por el momento, no habría acuerdo con la oposición para aprobarlo.
(Fuente: laizquierdadiario.com y MDZ on line)