Desde este espacio de El Cuco, hemos tratado de difundir el trabajo de personas y organizaciones que hacen a un modelo de economía más transversal, más distributivo, más justo. En esta última semana del año, una síntesis de ese nuevo relato en el que muchos y muchas son protagonistas.
Por Alejandrina Zotelo
Con la crisis del 2001 se manifestó crudamente la política económica que se había venido implementando durante las últimas décadas. La pobreza, la exclusión y las necesidades decantaron en el reclamo explícito por una vida mejor y un trabajo digno.
Pero también, durante los últimos años surgieron posibilidades de proyectar e impulsar estrategias y acciones de integración social desde una economía fundada en lazos de confianza y de cooperación social.
Existen organizaciones en Argentina y en nuestra provincia con historia de lucha en defensa del sector de agricultores y trabajadores rurales que proponen fundamentalmente generar y posibilitar otras relaciones sociales, otras relaciones con la naturaleza, otros modos de reproducción, otras opciones de vida en sociedad.
Así el Foro de Organizaciones de la Agricultura Familiar (FONAF) asocia a familias de productores en todo el país que a partir de espacios de trabajos compartidos, objetivos, necesidades y experiencias comunes realizan el proceso de establecer una síntesis en cuanto a los temas de Agricultura Familiar y Desarrollo Rural se refiere.
El mismo, según el testimonio de Claudia Herrera, representante de la comunidad Huarpe Guaytamari, surge en el año 2004 por la necesidad de que el sector se reúna tras años de lucha contra políticas de exclusión que aportaron a la acumulación de riquezas en algunos pocos y a la apropiación de las tierras de los pueblos originarios y de los pequeños agricultores.
Asimismo, la movilización social, como expresa Cristóbal Cardozo, representante de los trabajadores rurales en Mendoza del FONAF, logró que el Estado responda mediante la constitución de un área que es la Subsecretaría de Agricultura Familiar que respalda un sistema que garantiza la diversidad y la soberanía alimentaria, hace uso sustentable de los recursos naturales, valora el patrimonio cultural, genera empleo y arraigo local
La agricultura familiar como un modelo productivo sustancial
En este sentido este espacio de participación horizontal que aglutina a diversos sectores como trabajadores rurales, pueblos originarios y agricultores familiares debate diferentes necesidades y plantea a priori el beneficio de dichos grupos a través de mesas zonales en la provincia y en el país con el fin de construir en conjunto un modelo igualitario.
Esta forma de producción es considerada el segmento más vulnerable del campo en relación a los grandes productores y propietarios de capitales. En tanto la agricultura familiar, como manifiesta Guillermo Ander Egg, delegado local de Agricultura Familiar de la Nación, logra que los territorios encuentren un desarrollo más equilibrado, que no se produzcan procesos de concentración como sucede en la agricultura agroexportadora. Del mismo modo esta actividad reivindica lo cultural en tanto mantiene las identidades de los pueblos sobre las imposiciones globalizadoras.
En este marco, desde el punto de vista político, como expresara Cristian Correas, durante su función como titular de la Dirección de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar de la provincia, “los servicios del Estado tienen que estar destinados sobre todos a aquellos que contemplan el resguardo de los recursos naturales, la soberanía sobre el territorio y la capacidad de alimentar a las poblaciones locales”.
“Todavía me emocionan ciertas voces”
Apelando al subjetivismo tras trabajar con el seguimiento de un todo complejo que es la economía basada en las actividades tradicionales como la agricultura sostenida por núcleos familiares, de economías que se nutren del cooperativismo, la solidaridad y la lucha contra los grandes sectores neoliberales que reproducen una lógica de exclusión y acumulación desmedida del capital, no puedo dejar de resaltar mi admiración ante las movilizaciones sociales, el compromiso y las organizaciones que influyen fundamentalmente para que las y los de abajo tengan voz creando un auténtico poder ciudadano.
Tampoco puedo dejar de considerar el importante rol de los medios ya que tradicionalmente han tendido a homogeneizar un discurso en el que se legitima a un único sector, al persistentemente favorecido, al que ignora nuestras raíces identitarias.
No consigo abandonar mi postura que reclama que generalmente los canales comunicativos invisibilidad a aquellos pequeños grupos colectivos como la organización “Crece desde el pie” o a la cooperativa “Aromáticas Sancarlinas”de San Carlos que trabajan reivindicando a los agricultores minoristas, pero que sin embargo poco o nada se oye de su arduo labor plasmado en las producciones que mantienen una lógica solidaria que no se asemeja a la de los grandes productores.
Para concluir sólo me queda llamar a la reflexión ante el poder de compartir un espacio común y horizontal de trabajo que logran las instituciones en torno al desarrollo rural; sobre la importancia de la Agricultura Familiar, los pueblos originarios y los grupos cooperativos de Argentina y la provincia que batallan constantemente esperanzados en que todos seamos artífices del destino común.
Si bien queda mucho por resolver como la ley de desalojos que protege a campesinos, puesteros y pueblos originarios, hoy me emociona que a pesar de cada adversidad, otra alternativa al modelo económico imperante se fortalece e irrumpe con un proceso de construcción colectiva para definir un plan estratégico basado principalmente en las necesidades de las personas signada por los valores de la solidaridad, equidad, trabajo organizado, cooperativismo, participación social y desarrollo sustentable.
“Lo mejor es la unión, lo que queríamos nosotros era unirnos y ayudarnos los unos a los otros” Bruno Chávez-Integrante de la Cooperativa “Aromáticas Sancarlinas”
“Tratamos de ir caminando todos los grupos juntos intentando dar vuelta el escenario del día a día” Damián Moreno-Integrante del grupo de trabajo “Crece desde el pie”
“Todos podemos transformar una vida de exclusión en una realidad digna para todos” Claudia Herrera-Representante de pueblos originarios en el FONAF
“Si no nos juntamos nunca se van a solucionar las cosas” Cristóbal Cardozo- representante de los trabajadores rurales de Mendoza del FONAF
Un comentario
Buenisima la nota ale. Felicitaciones!!!!
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