Así lo aseguró a El Cuco Digital Gabriel Moschetti, titular de la División de Lucha contra el Narcotráfico en Valle de Uco.
Tras meses de investigación, esta mañana efectivos de la Dirección General de Lucha contra el Narcotráfico desbarataron parte de una banda narco que operaba desde hacia tiempo en el Valle de Uco y en el Gran Mendoza. Dicho operativo incluyó una serie de allanamientos donde secuestraron armas, droga, autos, dinero en efectivo y detuvieron a seis personas, entre ellas a un policía.
«Se realizaron 7 allanamientos, uno en la ciudad de Mendoza (Las Heras) y los otros allanamiento acá en Tunuyán, donde se logró la detención de 5 masculinos y una femenino; de los 5 masculinos uno era el efectivo policial a quien también se le allanó el locker (armario) en la Unidad Especial de Patrullaje de Tunuyán con un resultado negativo, pero involucrado a pleno en la causa desde hace aproximadamente 9 meses a la fecha», comentó Moschetti a este medio.
El efectivo fue identificado como Juan Sandoval, que prestaba servicio en la Unidad Especial de Patrullaje de Tunuyán y quien era el encargado de alertar sobre posibles operativos que atentaran contra los intereses de la banda.
Entre los allanamientos nombrados por el Comisario, los dos más significativos fueron los que se llevaron a cabo en calle Irigoyen al 1.600 de Tunuyán y en calle Álvarez Condarco al 500 de Las Heras. En estos domicilios secuestraron 6 ladrillos de marihuana con un peso de 7,607,4 gramos, una bolsa de cocaína con un peso de 668,3 gramos, 4.484 dólares y 46.890 pesos.
También se encontraron diferentes armas de fuego: una escopeta 12.70, dos rifles calibre 22 largo, un pistolón calibre 36, una pistola calibre 3.80, 2 revólver -uno calibre 32 y otro calibre 38- y cartuchos calibre 3.80, 9, 36, 12.70 y 22 largo.
Además, los uniformados encontraron un chaleco policial, una prensa con tubos metálicos y cilíndricos para armar «tizas» y prendas de uniforme policial.
Por último se retuvo una flota de vehículos utilizados por la organización compuesta por una camioneta Ram, dos autos (un Hyundai Génesis y un Fiat Uno) y cuatro motos (250 cc, 200 cc, 150 cc y 85 cc).
Con respecto a lo que fue la investigación y cómo surgen los datos para dar con la banda, Moschetti dijo: «Los datos surgen a través de llamados telefónicos y datos que nos aportan vecinos de la zona conforme a los lugares donde se va suscitando el narcomenudeo, así que así se logró determinar la participación de varios sujetos y también se logró determinar cómo iba trabajando la banda, cómo se desenvolvía dentro del departamento, dónde iban a buscar en la provincia de Mendoza y así mismo la función que cumplía el efectivo policial».
Por otro lado también se consultó al comisario al frente de la División de Lucha contra el Narcotráfico en Valle de Uco si la organización había sido desbaratada en su totalidad o si aún quedan algunas células, a lo que respondió: “No, la banda en su totalidad no, continua la investigación; las investigaciones no finalizan nunca cuando se interviene a una banda o se desbarata un kiosco, siempre sigue; vamos a continuar investigando y con nuestras tareas, y vamos a tratar de erradicar no solamente lo que es el narcomenudeo, que es lo que a nosotros más nos importan, sino tratar de llevarle tranquilidad a la sociedad de que estamos trabajando y que estamos a disposición de ellos para lo que necesiten».
Para finalizar, y con relación al sentimiento que le generó que un colega suyo haya sido participe de los hechos delictivos anteriormente nombrados, Gabriel Moscheti expresó: «siento una impotencia muy grande porque viste la misma embestidura que yo», sin embargó también contó que siente «orgullo respecto a los demás policías que uno tiene trabajando, que van a determinar y van a lograr la detención del efectivo policial gracias al trabajo mancomunado de cada uno de ellos, y desinteresado sobre todas las cosas, para lograr una depuración dentro de la fuerza policial que es lo más importante, y sacar a estas personas y ponerlas a disposición de la justicia».