Hoy se cumple un año desde el último contacto con el ARA San Juan con 44 tripulantes a bordo que nunca volvieron a casa.
Unas 4.000 personas de 18 países en 28 buques y 9 aeronaves participaron en el esfuerzo por encontrar el navío, pero esa ayuda internacional se fue apagando hasta que, el 2 de abril de 2018, se retiró el último buque no argentino. Desde entonces, los familiares comenzaron una ardua lucha para que la búsqueda continuara y el submarino no quedase olvidado en las profundidades del mar. Tras 5 meses de insistencia, el estado argentino contrató a una empresa que retomó la búsqueda el 7 de septiembre. Pero por contrato, la compañía interrumpirá sus trabajos este 15 de noviembre en coincidencia con el primer aniversario de la desaparición del submarino.
Hoy por hoy, las familias de los tripulantes siguen envueltas en dudas y le reclaman a la Armada Argentina, el Gobierno, la Justicia y también a la Bicameral de seguimiento que se conformó en el Congreso Nacional “la verdad”.
“Nuestros corazones no dan más, queremos respuestas, pasó un año y nuestros muchachos no aparecen. Alguien sabe qué pasó, dónde están, pero no dicen nada”, dijo con un profundo malestar Claudio Rodríguez, hermano del jefe de máquinas del submarino, Hernán Rodríguez.
“La empresa estadounidense Infinity buscó en todos las áreas donde todo el mundo dijo que debía estar el submarino y no pasó nada. Ahora se fueron hacia la zona en donde se habían escuchado los golpes. Si mañana (por hoy) no encuentran nada vuelven a Comodoro Rivadavia y listo, olvidate, no hay nada más, pero eso sí, empieza la otra parte porque ahora estamos con la duda, no creemos que haya sido la explosión donde dijeron”, dijo el docente alvearense.
Ante esta situación, Rodríguez reclama que “la Justicia actúe porque hasta ahora no se ha expedido, no pasa nada. Que la bicameral empiece a dar resultados de la investigación que está haciendo, que pidan los informes verdaderos de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares que informó sobre la explosión. Que el Gobierno no sea cómplice de la Armada o al revés. No podemos seguir así».
«Está la teoría de la explosión, después se filtró otra que era que se equivocaron los muchachos. Si ellos tienen teorías, nosotros también, que están ocultando”, agregó.
“Todo es muy raro y muy duro a la vez, pero seguiremos como podamos; la tarea más grosa empieza ahora, cuando regrese el barco de búsqueda”, concluyó Rodríguez.
Fuente: CNN / Los Andes