Los restos fueron hallados en Plottier. Se trata del fémur y las costillas de un saurópodo. Lo encontró un vecino de la zona.
En principio creyeron que podría tratarse de un indicio más de la presencia de restos de dinosaurios en el sector. Pero el dato, que por curiosidad aportó un vecino, se transformó en un descubrimiento que abre singular expectativa en los paleontólogos: se trata de un saurópodo de enormes proporciones.Se trata del fémur, las costillas y una fíbula (unión de huesos) que se encontraban dispersos en los dos sitios y que fueron rescatados luego de un trabajo de tres semanas por un grupo de profesionales de la provincia. El material, de acuerdo a lo que informó la oficina de prensa del gobierno, ya fue trasladado al centro de estudios de Plaza Huincul.
La oficialización de los restos encontrados en inmediaciones de un yacimiento petrolero -no se precisó el lugar-, fue dada por personal calificado de la dirección provincial de Cultura, quienes dieron cuenta de que fueron hallados en dos lugares distintos.
Tras el aviso del poblador y a poco de iniciadas las actividades de excavaciones el material fue rescatado por los paleontólogos Flavio Bellardini, Francisco Barrios y Matías Baiano quienes junto a los técnicos Fernando Perri y Ulises Avendaño.
La información del hallazgo fue dada por la directora de Patrimonio Cultural, Claudia Della Negra. «Gracias a la denuncia de un poblador en el transcurso de los últimos 20 días en ambos sitios se realizó el rescate de fragmentos de huesos del dinosaurio», señaló la funcionaria.
«Lo que comenzó con una astilla de hueso fósil terminó siendo un saurópodo de importantes dimensiones», explicó.
Detalló que la especie encontrada se caracteriza por ser herbívora y en su composición fisonómica exhibía el cuello largo, una cabeza pequeña, patas gruesas y una cola robusta. «El cuello de los saurópodos puede presentar 10 o más vértebras cervicales», dijo Della Negra.
El trabajo de campo realizado por el equipo de investigadores consistió en la prospección, excavación, armado y traslado de bochones. Las tareas se realizaron con herramienta manual y se extendieron en un radio mayor al de los huesos hallados en búsqueda de materiales, pero no se registraron otros fósiles.
Según lo establecido por la Ley 2184/96 de Patrimonio Histórico, Arqueológico y Paleontológico los restos fueron trasladados al Museo municipal Carmen Funes de la localidad de Plaza Huincul, para realizar posteriores estudios, informó Della Negra.
Comían piedras
Los saurópodos eran dinosaurios de enormes proporciones. Por lo general, sus dientes eran espatulados o lanceolados, por eso no resultaban efectivos para la masticación. Debido a ello, los saurópodos ingerían piedras denominadas gastrolitos, las cuales facilitaban los procesos de digestión al remoler los vegetales en la molleja.
Las aves modernas (al no poseer dientes) y los cocodrilos emplean el mismo sistema. Los saurópodos eran animales de hábitos gregarios, lo cual es corroborado por huellas fósiles y grandes zonas de nidificación descubiertas en Argentina.
Fuente: Diario Uno