El jefe de Gabinete consideró que no hay motivos para una medida de fuerza en el sector del transporte «porque las paritarias se cerraron ayer»
«¿Por qué se va a llevar a cabo el paro si se arribó a las paritarias?», se preguntó el jefe de Gabinete, y de inmediato opinó que «ese paro no tiene vocación en términos de esta paritaria, porque hasta ayer yo escuché a varios de sus referentes sindicales que se hacía un paro porque no se cerraban las paritarias. Bueno, las paritarias se cerraron, entonces esa vocación definida por algunos sindicalistas ha perdido el objeto; ya no está más ese objeto».
Como es habitual, el jefe de Gabinete habló esta mañana con la prensa, minutos antes de ingresar a su despacho en la Casa de Gobierno.
En ese mismo sentido, Fernández dijo después que «los otros motivos de los sindicalistas es otra cosa…Y si se quiere seguir adelante con un paro de actividades, entonces, ¿saben qué? Lo que hay acá es un paro político. Están buscando alguna conclusión política, porque quieren participar del clima de la elección, del clima del año electoral, y eso es lo que uno no puede estar prestándole atención».
Ante la insistencia periodística y consultado sobre si el paro convocado busca impactar en las elecciones de este año, Fernández contestó: «Sí claro, no tengo dudas. Si no deme la explicación de cuál es la razón por la cual lo van a sostener».
«Por ejemplo, la UTA no tiene prácticamente trabajadores que estén alcanzados por el impuesto a las Ganancias -añadió Fernández-, porque el porcentaje de trabajadores del sector, que rozaba entre el 7 y el 8 por ciento de la totalidad de la masa de sus trabajadores que era alcanzado por el impuesto, con las correcciones que se hicieron en las últimas semanas por parte del Ministerio de Economía, y, por supuesto, por orden de la Presidenta, muestra a las claras que prácticamente no tiene trabajadores que les impacte el impuesto a las Ganancias».
«Este argumento de medida de fuerza es una utilización para beneficio propio o llámele como se les ocurra, pero que nada tiene que ver con los intereses
Fuente: Télam