El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, llamó a la oposición a «no alterar el funcionamiento de las instituciones» y la criticó por haberse retirado ayer de la sesión en el Senado en la que brindó su informe.
«La Argentina no necesita ni empleados de grupos monopólicos ni económicos, ni gerentes administrativos de proyectos ajenos; Argentina necesita líderes políticos con convicción política e ideológica, con experiencia de gestión y capacidad de trabajo», aseveró Capitanich al criticar a la oposición.
En su habitual conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, Capitanich afirmó que «la oposición política tiene derecho a ejercer críticas, que pueden ser duras y contundentes, pero no tiene derecho a pretender alterar el funcionamiento de las instituciones».
En ese marco, se preguntó si se trata de «falta de coraje cívico o en la defensa de sus convicciones, o incapacidad para manifestar efectivamente sus ideas o falta de coraje político para defender sus ideas».
«Hablar, habla cualquiera; hacer, implica un esfuerzo adicional y la verdad es que, ahora, ni siquiera hacen el esfuerzo de hablar», aseveró.
El jefe de Gabinete recordó que «todo el tiempo se criticó al Gobierno por no tener una agenda comunicacional» y sostuvo que «antes nos criticaban porque no hablábamos y ahora porque hablamos».
Lo mismo ocurre en el Congreso: criticaban por no cumplir con el artículo 101 de la Constitución y, ahora que lo cumplimos a rajatabla, no participan del debate», postuló.
Por otro lado, insistió con que es «absolutamente inviable» el planteo de la oposición respecto a un pedido de licencia de Amado Boudou, defendió el principio de «presunción de inocencia» del vicepresidente y pidió «igual trato» en relación a «la situación similar» que, desde el punto de vista judicial, atraviesa el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Sostuvo que, «desde el punto de vista institucional», la Constitución Nacional prevé el mecanismo del juicio político y recordó que esa alternativa «fue debidamente analizada en el ámbito que corresponde», la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados, que «recibió ocho proyectos en ese sentido y todos fueron rechazados `in limine`».
Capitanich afirmó que «el vicepresidente jamás obstaculizó» el accionar de la Justicia y que, por el contrario, mostró «siempre una disposición permanente» a colaborar con la investigación, en referencia al caso Ciccone.
En este sentido, Capitanich enfatizó que «Macri está en la misma situación» que el vicepresidente -en alusión a su procesamiento que pesa en su contra en el marco de la causa que lo investiga por un presunto sistema de escuchas ilegales-, con lo cual «merecen un tratamiento similar».
«Uno de ellos ejerce el rol de ser jefe de la ciudad y, el otro, de vicepresidente, pero el trato no es equivalente ni por parte de los medios de comunicación monopólicos ni por parte de los opositores», reprochó el jefe de Gabinete.
«Es absolutamente inviable lo que solicita la oposición respecto al pedido de licencia del vicepresidente», dijo Capitanich, quien indicó que el titular del Senado «no puede estar sometido a un proceso de licencia, ya que integra la fórmula de carácter presidencial, pertenece al Poder Ejecutivo y preside el Senado; y la Constitución establece los mecanismos para que pueda dejar el cargo en caso de renuncia, remoción por vía de juicio político o muerte».
Fuente: Télam