No es una situación de ahora sino que data de años. Desde que ingresó la gestión demócrata al municipio sancarlino, el órgano legislativo encargado de controlar no tiene presupuesto propio, y lo que es más, algunos concejales opositores no tienen secretario, mientras otros disponen de dos o tres secretarios.
Cada concejal puede tener un mínimo de un secretario para agilizar la labor, esto según lo que ocurre en todos los Concejos Deliberantes del territorio provincial. Sin embargo, en San Carlos es distinto. Luego de las posturas tomadas por cada edil en la última votación para la presidencia del HCD (Honorable Concejo Deliberante), tres concejales que en su momento no votaron al oficialismo, o a sectores cercanos, (Elsa Nuarte, Juan Jofré y Alicia Caraballo), hoy no cuentan con el beneficio de estas herramientas. Denuncian que esta situación es una traba política.
Según manifestaron los concejales opositores, “esta es una forma de presionar y condicionar el trabajo nuestro, a veces cuando el concejal no está o deben hacerse algunos trámites, el secretario es quien puede agilizar y hasta representarnos en diversas situaciones”.
También sostuvieron, “la figura del secretario ni siquiera aparece claramente en el presupuesto, hay un monto destinado para personas que realizan tareas administrativas (donde uno podría suponer se trata de los secretarios) pero no está claro, como tampoco está claro de cuantas personas se trata”.
Los puestos son designados desde la presidencia del Concejo Deliberante, y es aquí donde los concejales denuncian un claro perseguimiento político hacia dentro del recinto: “me ha pasado que representantes del mismo oficialismo en el concejo me han dicho claramente: si nos hubieras votado, tendrías secretario, incluso una de las dos concejales se quedó sin secretario luego de no votar a favor del oficialismo”.
Esta situación también se repitió años atrás, cuando el Partido Demócrata, apenas asumió su primera gestión, dejó sin presupuesto al órgano legislativo y a los concejales opositores sin secretarios, sin teléfono y sin internet. En ese momento los concejales de la oposición que mantuvieron su postura crítica eran: por la UCR Omar Sorroche y Kitty Nuarte, y por el PJ Silvio Pannocchia.
Presupuesto: inexistente y situaciones poco claras
En el presupuesto municipal no está del todo claro el manejo interno del dinero. Hasta el momento el Concejo Deliberante se ha manejado prácticamente sin recursos económicos propios; la mayoría de los pedidos de dinero que llegan al concejo (proveniente de diversas entidades y particulares solicitando recursos) han sido girados directamente desde el Ejecutivo Municipal a cargo de Jorge Andrés Difonso, porque “el concejo no cuenta con los fondos necesarios”.
Según la Ley Orgánica de Municipalidades (Nº 1.079) debe armarse un presupuesto aparte para el Concejo Deliberante, el cual servirá como recurso máximo para la labor anual. Hasta el momento esto no ha sucedido y el recinto legislativo sancarlinos se ha mantenido sólo con el presupuesto del municipio, algo que se encuadra fuera de lo legal. Esto –y tal como manifiestan los concejales- sirve como una herramienta condicionante en la principal tarea que debe llevar adelante un concejal: controlar la administración de los recursos públicos administrados por el Poder Ejecutivo, en este caso por la gestión demócrata sancarlina.